El nuevo coronavirus COVID-19 ha infectado a más de 2,2 millones de personas en todo el mundo, de ellas más de 700.000 solo en Estados Unidos, el país más afectado y con mayor número de muertes contabilizadas, más de 36.000. España, con más de 191.000 casos, es el segundo país con más contagiados, seguido de Italia, con más de 172.000.
Tras ellos se sitúan Francia y Alemania con más de 149.000 y 141.000 respectivamente, y Reino Unido, con más de 109.000, reseña el portal de RTVE.
Los seis países han adelantado a China, el epicentro original de la pandemia, que registra más de 82.000 casos, la gran mayoría ya recuperados, mientras que la cifra de decesos en todo el mundo supera los 154.000 y la de los recuperados, los 566.000.
Italia y España han superado las muertes de China este mes de marzo y entre ambos países suman más de 42.000 fallecidos. La enfermedad tuvo gran incidencia en Corea del Sur en febrero, pero logró contener la propagación a mediados de marzo.
La rapidez con la que se extiende el virus ha llevado a varios países a cerrar sus fronteras. La Unión Europea cerró sus fronteras exteriores hasta el 17 de abril y más de 85 países han prohibido la entrada de viajeros países con una gran incidencia, como Italia o España.
Es el caso de Estados Unidos, que ha prohibido la entrada de vuelos europeos durante un mes o Israel, Arabia Saudí, Malasia, Nepal, Italia o El Salvador. Otros ciudadanos viven confinados o deben hacer cuarentena al viajar a otro país mientras miles de vuelos en todo el mundo han sido cancelados, los negocios se paralizan y la economía mundial se ralentiza.
GV