Costos de rubros ajustados este año subieron hasta 1.194,11% desde 2010

Costos de rubros ajustados este año subieron hasta 1.194,11% desde 2010

En 2010 con Bs 44,41 se compraba un kilo de harina de maíz precocida (Bs 3,37 costo oficial), uno de azúcar (Bs 3,73), otro de pasta (Bs 3,26), de carne (Bs 17), de pollo (Bs 11,31) y un litro de aceite de maíz (Bs 5,74), pero actualmente se necesitan Bs 373,57 para adquirir esta lista tras el ajuste de precios a esos rubros que aplicó el Gobierno nacional en el último lustro.

 

Hace cinco años, el día de salario mínimo (jornada diurna) era de Bs 40,79, mientras que en 2015 llegó a Bs 187,46, con el aumento de 15% que empezó a regir el 1° de febrero.

 

Quienes ganaban esa cantidad en 2010 apenas necesitan Bs 3,62 adicionales para completar el monto con el que podían llevarse esos seis artículos de la canasta alimentaria.

 

Ahora deben tener otros Bs 186,11 para obtenerlos, es decir, trabajar poco más de dos días. Estas cifras corresponden sólo a los precios regulados porque en el comercio informal los montos son mucho más altos debido a la escasez.

 

En lo que va de 2015, el gobierno ha incrementado el valor de seis de los rubros que integran la canasta básica de los venezolanos, que en marzo se ubicó en Bs 20.919,53.

 

Los primeros en sufrir el incremento fueron la harina de maíz precocida y el azúcar (a principios de febrero), le siguieron la carne de res y el pollo (finales de ese mes) y los más recientes fueron la pasta y el aceite de maíz (5 de abril).

 

Entre 2010 y 2015 esos seis productos sufrieron un ajuste oficial que va desde 360,12% hasta 1.194,11%. Hace cinco años el Ejecutivo llevó el kilo de harina de maíz a Bs 3,37 y hace menos de dos meses a Bs 19, lo que representa un alza acumulada de 463,79%.

 

En ese mismo lapso el kilogramo de azúcar refinada pasó de Bs 3,73 a Bs 26,57 (612,33% de aumento).

 

Mientras que el de la carne de res (cortes de primera) sufrió un ajuste de 1.194,11% en ese período, el más alto de estos seis rubros, al pasar de Bs 17 a Bs 220. El pollo subió 474,71%, al ser llevado de Bs 11,31 a Bs 65.

 

El costo del kilo de pasta regulada experimentó un ascenso de 360,12% en este lustro. Pasó de Bs 3,26 a Bs 15. El litro de aceite presentó un incremento de 387,80%, es decir, que en 2010 costaba Bs 5,74 y desde este mes está a Bs 22,26.

 

En este tiempo, algunos de estos rubros tuvieron hasta casi cuatro años sin ajustes, como es el caso del aceite de maíz que mantuvo sus precios desde 2011 hasta 2014.

 

Lo mismo ocurrió con la pasta en 2012 y 2014, con la carne en 2012, 2013 y con el azúcar y el pollo en 2013. La harina de maíz si recibió aumentos todos los años en este lapsos.

 

“Arepa con margarina”

 

Los anzoatiguenses Rafael Mogollón y Carlos Yaguaracuto, quienes laboran como albañiles en una obra en Barcelona, ganan Bs 3 mil semanalmente y casi 75% de ese monto se les va en comprar la comida (para siete días) y en el pasaje. El resto es para los otros gastos de sus hogares.

 

“Hay productos que cuestan hasta 10 veces más que hace cinco o seis años. Ya hasta el café es un lujo, y más para nosotros que lo consumimos varias veces en el trabajo, esta crisis es muy dura” manifestó Mogollón.

 

Además de su sueldo, en la casa de Yaguaracuto también cuentan con los ingresos de su esposa y de su hijo mayor, quienes perciben salario mínimo de Bs 5.622, 48. “Ni con estos tres sueldos vivimos tranquilos. Hacemos un sacrificio y muchas colas para comprar todo”.

 

Según Milagros Villafane, presidenta del Movimiento de Consumidores de Anzoátegui, los casos de Mogollón y Yaguaracuto son la radiografía actual de la mayoría de los hogares venezolanos que están afectados por el alto índice inflacionario, escasez y desabastecimiento, que se traducen en un altísimo costo de la vida.

 

“La dieta diaria del venezolano cambió drásticamente en los últimos años, al punto que actualmente lo que más se consume es arepa con margarina y sin proteína porque la carne y el pollo no se consiguen y cuando aparecen es a montos casi imposibles de pagar”.

 

Refirió que en el país ya no hay clase media porque prácticamente la inflación y la crisis económica la desaparecieron.

 

“Aquí lo que hay es la clase pobre, y la rica que siempre se mantiene, y que actualmente es la burguesía que generó este gobierno. Lo que sí tenemos es menos poder adquisitivo y calidad de vida porque la escasez y el encarecimiento es en todos los sectores. La inflación nos está afectando de manera colectiva, sus altos índices no son selectivos”.

 

Con sacrificio
Para la obrera jubilada Ana María Rojas, quien reside en Puerto La Cruz, ir al mercado se convirtió en una tortura ante la escasez y alto costo de los productos. “Soy revolucionaria de corazón, amo a Hugo Chávez, pero no me imaginé vivir mi vejez así: sufriendo para conseguir qué comer. Me calo las colas porque lo que gano no me alcanza para comprarle a los bachaqueros”.

 

Sale caro
“Los venezolanos estamos tan mal que hasta sobrevivir nos sale excesivamente caro porque aquí no hay salario mínimo que aguante este chaparrón. La escasez y el alto costo me tienen enferma, estresada y casi loca porque no sé dónde hacer mercado”, se quejó la porteña que prefirió identificarse como Reina Díaz. Dice que en el país se perdió el poder adquisitivo hace años.

 

 

 

Nathalia Guzmán Soto

FOTO AVN

El Tiempo

Comparte esta noticia: