No se han terminado de contabilizar los daños que dejaron los saqueos en una ciudad del país, cuando llegan reportes de ataques a los comercios de otra zona. En lo que va de año se han producido decenas de ataques a la propiedad privada y los comerciantes exigen que se tomen medidas para evitar más daños.
“Pedimos a las autoridades que haya una vigilancia permanente a los comercios, que haya un monitoreo constante, de modo que cualquier intento de saqueo se pueda aplacar rápidamente”, afirmó María Carolina Uzcátegui, presidente de Consejo Nacional del Comercio y los Servicios.
Aseguró que solo el sábado pasado fueron saqueados más de 40 comercios en Calabozo, Guárico, aunque el gobernador de la entidad, José Vásquez, afirmó que los establecimientos afectados fueron 20.
“Los dirigentes gremiales de Calabozo nos han reportado que fueron 49 los comercios afectados. Son establecimientos que quedaron muy mal. Algunos están completamente devastados. La situación fue mucho más fea de lo que se vio en fotos y videos”.
Uzcátegui insistió en que este tipo de acciones lo que generan es más desabastecimiento y desempleo. “Aún cuando los propietarios de esos comercios deseen volver a subir sus Santamaría va a ser muy difícil que lo logren”.
Agregó que también será dificultoso que los comercios que no fueron arrasados abran sus puertas, pues sus propietarios sienten mucho miedo después de ver lo que ha estado sucediendo. Además, también se han visto afectados por los robos y ataques a los camiones que trasladan alimentos.
“Lo que estamos viendo en las carreteras es anarquía absoluta. La gente no solo se lleva la mercancía que cargan en los camiones, también desvalijan las unidades. En cuestión de segundos quitan cauchos, baterías y todo lo que pueden. Ponen en riesgo la vida de los chóferes y de sus ayudantes. Ya hay productores que han manifestado que no están dispuestos a salir a distribuir sus productos por el alto riesgo”.
Afirmó que hasta el momento la respuesta de las autoridades ante los saqueos ha sido ineficiente. Refirió que en ocasiones los funcionarios de seguridad se han hecho a un lado, mientras personas ingresan a los comercios y se roban los productos.
“Se ha denunciado que en algunos casos las autoridades no han hecho nada, incluso que algunos funcionarios participan también en los saqueos”, dijo.
Reiteró que las autoridades deben tomar las medidas necesarias para evitar que se produzcan más ataques a la propiedad privada, que sigan perjudicando la distribución de bienes e incrementando la escasez. “Este año los anaqueles están muy vacíos. El desabastecimiento va a sentirse por un tiempo prolongado”.
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