El gremio se «considera moralmente obligado a exhortar a quienes corresponda, a reformar y flexibilizar el Reglamento parcial de la Ley Orgánica del Trabajo».
Consideran que un cambio en las normas sobre la jornada laboral servirá para evitar que “se siga complicando lo que se ha apreciado a nivel nacional después del 7 de mayo, cuando entró en vigencia la reforma de la jornada laboral: unidades comerciales y prestadoras de servicios que deben cerrar prácticamente más de dos días de trabajo por semana, e imposibilitadas de contratar más personal, trabajadores afectados en sus ingresos y complementaciones alimenticias, y consumidores molestos, al no entender qué se pretende con la decisión de obligarles a no poder ocuparse de actividades familiares y compras de fin de semana, ante el cumplimiento de la medida por las diferentes empresas”.
Agrega en un comunicado el gremio que «no están demandando tratamientos preferenciales, ante su obligación de cumplir con lo que está fijado en la Ley. Tampoco que exista interés en cambiar plazos, según la flexibilización aún vigente del pasado 7 de mayo. Simplemente, la institución llama la atención sobre el hecho de que, una vez más, la realidad que arroja el cumplimiento de ciertas leyes que se aprueban sin ser consultadas con los verdaderos dolientes, terminan convirtiéndose en todo lo contrario a los propósitos y espíritu de las normas”.
“Habilitemos a los trabajadores y a los empleadores para que ejerzan su libre derecho a elegir entre ellos cuales serán las mejores condiciones de trabajo en las que se desempeñarán, y desde donde le puedan ofrecer la mayor cantidad y calidad de bienes y servicios a todos los venezolanos», concluyen. /JM
Fuente: ÚN