Conos de hojaldre rellenos de chocolate, ideal para una merienda deliciosa

Conos de hojaldre rellenos de chocolate, ideal para una merienda deliciosa

Primero que todo necesitaras  estos conos de aluminio, que podrás encontrar en cualquier tienda que tengan utensilios de repostería.

 

Conos de hojaldre rellenos de crema de chocolate

 

Ingredientes para 17 conos:

– Una placa de masa de hojaldre

 

– 1 huevo batido para pintar la masa

 

Para la crema  pastelera de chocolate:

 

– 250 ml de leche

 

– 1 ramita de canela

 

– 70 g de chocolate para fundir

 

– 70 g de azúcar

 

– 30 g de harina

 

– 1 huevo

 

Preparación: 

Lo primero que tenemos que preparar es la crema pastelera para que se vaya enfriando, para ello ponemos un cazo al fuego, con la leche y la rama de canela. Cuando veamos que da el primer hervor, retiramos el cazo del fuego, sacamos la canela, y echamos el chocolate troceado ( cuanto más pequeños sean los trozos, mejor se derretirá ), y movemos con una varilla hasta que se integre totalmente. Por otra parte, en un bol, echamos el azúcar, la harina, y el huevo, y movemos bien hasta que se haga una papilla. Vertemos sobre esta papilla la mezcla de leche y chocolate, y removemos bien. Echamos de nuevo en el cazo, y ponemos a fuego medio, sin dejar de remover, hasta que espese. Dejar templar, cubrir con film de plástico, y meter en la nevera para que se enfríe.

 

Mientras tanto vamos a preparar los conos de hojaldre. Cogemos la masa y la extendemos sobre una encimera, con un cuchillo, cortamos tiras de un centímetro aproximadamente.

 

Ahora vamos cogiendo una a una las tiras de masa de hojaldre y vamos a enrrollarlas en los conos, previamente engrasados, ( yo los pinto con un pincel de silicona, con un  poco de aceite ), empezando desde la parte más fina hasta la más ancha. Deberán quedaros así:

 

Los pintamos con huevo batido, y los metemos en el horno precalentado a 200º C, sobre una bandeja con papel vegetal, hasta que estén doraditos. Más o menos estarán listos en 10 minutos.

 

Cuando los veamos doraditos, los sacamos del horno y dejamos enfriar. Una vez fríos desmoldamos con cuidado de que no se rompan.

 

Ahora solo nos queda poner la crema pastelera en una manga, rellenar los conos y decorarlos con chispas de colores.

 

Y comérnoslos claro!

 

Fuente: Facilisimo 

Comparte esta noticia: