El presidente de Confederación Venezolana de Industrias (Conindustria), Juan Pablo Olalquiaga, señaló que la producción en el país a bajado y que 4 de cada 10 productos que antes se producían se han dejado de fabricar desde el 2012.
“Desde el 2012 hasta el 2016 ha habido una caída de un 39,3% del PIB per cápita, se ha bajado un 40% la actividad para el sector manufacturero acumulado en estos años, lo que es una caída dramática 4 de cada 10 productos que se fabricaban en el 2012 ya no se están fabricando”, dijo durante entrevista por Primera Página por Globovisión.
“El segundo trimestre del año 2015 versus el segundo trimestre del 2016 ha habido una caída del 27% en el nivel de actividad de las empresas industriales”, resaltó.
Argumentó que la reducción en las producción se ha debido a la falta de la materia prima, “hay muchas causas como la falta de materia prima, principalmente en la ganadería y la agricultura han tenido muchas dificultades ellos de tener sus niveles operativos, Sidor ha estado mucho tiempo parada, el sector petroquímico también ha tenido disminuido su suministro aguas abajo y en consecuencia vas teniendo de materias primas locales, si a eso se le agrega la baja en las importaciones”.
“La guerra económica no existe, las compañías desean trabajar y no tienen acceso a la tecnología o materia prima importada para hacerlo, son cosas que se le van imponiendo a las compañías. En Venezuela trabajar lo más que se desea con todas las limitaciones que hay”.
Agregó que no existe un mecanismo cambiario para que empresarios puedan intercambiar directamente los bolívares por divisas para comprar materias primas: “En la medida que no hay un mecanismo cambiario para poder convertir bolívares en divisas para poder pagar la deuda que se tiene y luego comprar materias primas nuevas te das cuenta que no tienes ni materias primas locales ni importadas”.
“Venezuela no puede mezclar lo político con la economía, esta última es un entorno complejo en el que se debe privilegiar el que las personas que tengan los conocimientos gerenciales y tecnológicos tengan libertades para poder hacer las inversiones en sus áreas (…) Si se es respetuoso de la propiedad privada, del Estado de derecho, si tienes un sistema jurídico que permita protegerte de dirimir diferencias y del Estado y que a la vez tienes una economía de mercado con libertad cambiaria, de precios, ahí las compañías van floreciendo y eso es lo que no tienen las empresas venezolanas en estos momentos”, destacó.
Criticó: “El Consejo Nacional de Economía Productiva lleva ocho meses sesionando y ahí no se ha llegado a generar las políticas económicas que des-entraben la economía en su conjunto (…) La consecuencia de tener medidas improvisadas y anárquicas, como las que hay, se traducen en imposibilidad para que las empresas puedan generar operatividad, rentabilidad y puestos de trabajo”.
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