Cada vez más tensas se encuentran las relaciones entre el Gobierno del izquierdista Pedro Castillo y el Congreso peruano, de mayoría opositora. Los legisladores buscan avanzar en normas que no sólo eviten el llamado a una Asamblea Constituyente, una de las principales promesas del presidente, sino que también abran la puerta a una eventual destitución del mandatario.
La insistencia del Congreso peruano en aprobar una ley que limitaría las facultades del presidente de la República sobre el respaldo a su Gobierno encendió las alertas en el Ejecutivo por la posibilidad de que facilite una eventual destitución presidencial.
A pesar de que el Gobierno del izquierdista Pedro Castillo observó el dictamen de la Comisión de Constitución sobre el ejercicio de la cuestión de confianza, este grupo de trabajo convocó el sábado a una reunión de trabajo para aprobar por insistencia esta norma.
El dictamen busca limitar la facultad del presidente de plantear la cuestión de confianza ante el Parlamento solo a temas referidos a su política de Gobierno, más no a asuntos referidos a reformas constitucionales ni a competencias del Legislativo.
De esta forma, el Congreso, de mayoría opositora, busca impedir que Castillo promueva la Asamblea Constituyente para modificar la carta magna, una de sus promesas de campaña, así como un eventual cierre del Legislativo, como hizo el exmandatario Martín Vizcarra en 2019.
De acuerdo con la legislación vigente, el jefe de Estado puede cerrar el Congreso en caso de que el Parlamento le niegue en dos oportunidades consecutivas el voto de confianza a su Gobierno.
Allanar el camino a la destitución
El ministro de Justicia, Aníbal Torres, expresó este domingo en su cuenta de Twitter que “limitar la cuestión de confianza es limpiar el camino para la vacancia (destitución) presidencial”.
“Romper el equilibrio de poderes es acabar con la democracia. Por el bien de la gobernabilidad, el Congreso debe actuar responsablemente”, agregó el experimentado abogado.
El dictamen aprobado el sábado tiene que pasar al pleno del Congreso para su ratificación definitiva en los próximos días.
La presidenta del Consejo de Ministros, Mirtha Vásquez, manifestó su preocupación por la aprobación por insistencia del dictamen.
“Es importante revisar la regulación de esta figura, pero también es fundamental garantizar una deliberación adecuada”, indicó Vásquez en su cuenta de Twitter.
“Este dictamen podría alterar el principio democrático de balance de poderes, lo cual afecta seriamente al Estado de Derecho”, subrayó.
La primera ministra se reunirá con las bancadas en el Legislativo antes de pedir la confianza al nuevo gabinete que encabeza y en esas rondas espera encontrar “una fórmula normativa equilibrada que disipe los temores y corresponda a las reglas democráticas”.
Fujimorismo defiende norma
A su vez, la legisladora del partido fujimorista Fuerza Popular, Patricia Juárez, declaró a RPP Noticias que “de ninguna manera se está haciendo una modificación constitucional implícita y tampoco se le están recortando (las facultades) al señor presidente de la República, ni al presidente del Consejo de Ministros”.
La congresista opositora añadió que “lo único que se ha hecho es regresar al equilibrio perdido por la irrupción, amenaza, abuso y prepotencia que, en su momento, hizo el señor Vizcarra”.
Juárez defendió el argumento del Congreso de que el Ejecutivo no puede observar reformas constitucionales y tampoco puede pedir la confianza sobre reformas constitucionales.
No obstante, la legisladora del partido izquierdista Juntos por el Perú, Ruth Luque, declaró que se había consumado “una nefasta norma inconstitucional, a todas luces, donde se está quebrando el equilibrio de poderes”.
La parlamentaria del grupo aliado al Ejecutivo añadió que “se está generando un mayor peso en el Congreso de la República por encima del Poder Ejecutivo”.
Luque dijo que el Ejecutivo tendrá que presentar una acción de inconstitucionalidad, en caso de que el dictamen se apruebe en el pleno.
EFE