Luego de tantos dimes y diretes, finalmente Nacho habló sobre su relación con su esposa, Inger Mendoza.
En entrevista para el programa Al rojo vivo, el criollo fue cuestionado sobre lo complicado que se torna una relación de muchos años, interrogante a la que este respondió: “Depende de cómo se vea. La de la madre de mis hijos y yo tiene momentos de rupturas o de separación donde la tolerancia no está muy alta”.
Para luego agregar: “Comprendemos a la familia de una manera muy distinta. Entendemos que hay personas que son parejas y tienen intimidad, pero que no son familia. Y hay personas que son grandes amigos, que son padres de los mismos hijos y son una familia unida».
“Quizás estamos pasando por eso en este momento y la gente no lo nota porque hemos decidido no dejar de ser familia nunca”, apuntó.
Asimismo, dejó por sentado que Inger actualmente lo apoya en su carrera más que nunca.
“Creo que está más involucrada en este momento en la parte laboral, que en la parte sentimental. Hemos decidido darles a nuestros hijos unos padres a tiempo completo por encima de la situación que estemos pasando. Lo que sí te puedo decir es que una familia no la hacen los besos”, señaló.
Según él, una familia “es construida en base al amor, en base al apoyo, al respeto y esas cosas a nosotros nos sobran. Lo que sí le pido al público es que se preocupen menos por el hecho de que Inger y yo seamos pareja sentimental y que tengamos intimidad, y vean más por el hecho de que nosotros hemos decidido nunca rompernos como familia”.
Ronda