Alcanzó la fama mundial cuando se convirtió en la ganadora de Eurovision 2014 , tras descollar con su versión de «Rise like a Phoenix». Para muchos conocida como «la mujer barbuda», Conchita Wurst, artista austríaca que puso en boca de todos a los drag queens, ahora busca conquistar el mundo entero y no va a parar hasta obtener un Grammy.
Convertida en un suceso internacional, era cuestión de tiempo que llegara a uno de los escenarios más famosos de Londres, el del conocido club nocturno G-A-Y, donde ofreció una increíble performance el sábado pasado.
Según contó la cantante, recibió felicitaciones de la mismísima Cher, de Elton John y su pareja Dave Furnish que además le enviaron un ramo de flores cuando ganó Eurovision. «Mi objetivo es un Grammy, así que mis canciones tendrán que ser muy buenas», dijo en una entrevista.
Enfundada en un babydoll, Conchita, que ya fue reconocida por varias publicaciones como una de las mejores vestidas de Cannes, pasarela de la moda exigente si las hay, deslumbró con una espectacular figura.
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