Todos deseamos enamorarnos y vivir una historia de amor única e irrepetible pero a veces el miedo a que nos hagan daño supera nuestros deseos de encontrar a una persona especial. Sin duda, si nos vemos ante esa tesitura, la ansiedad y el sentimiento de fracaso reinarán en nuestra vida sentimental. Muchas personas desean liberarse del miedo que les produce el rechazo y el abandono para volver a ser felices y sentirse seguros, pero no saben como hacerlo o se han acomodado a su zona de confort.
Instrucciones:
1. El motivo por el cual nos da miedo enamorarnos es porque tenemos miedo al rechazo. Cuando conocemos a una persona que nos gusta mucho, lo normal es que queramos estar con ella, quererla, cuidarla y que ella nos corresponda, pero a veces algunas personas, ya sea porque han sufrido un desengaño o por baja autoestima, se niegan a vivir esa experiencia. En estos casos el miedo ha podido con ellas ya que cambiar esa situación les supondría salir de su zona de confort.
El rechazo y el abandono, que son al fin y al cabo lo mismo, son circunstancias de las que nadie estamos exentos. El amor requiere una cierta dosis de valentía y de altruismo, de lo contrario no sería amor pero muchas personas que tienen miedo enamorarse no lo ven así, temen que su ego quede herido y eso es lo que les marca el camino para no vivir el amor de manera plena y desinteresada.
Las personas que entienden el amor como lo que es, la necesidad de dar, de amar como una manifestación de su propia naturaleza y que no busca una recompensa ya que, si la otra persona nos ama, llegará sola, no tienen miedo a enamorarse.
2. Los fracasos amorosos pueden verse de muchas formas, si nos empeñamos en discernir entre buenos y malos, probablemente siempre veamos injusticias donde no las hay. Si, por el contrario, somos capaces de darnos cuenta de que nadie es perfecto, ni mucho menos nosotros, podremos ver la situación con más perspectiva. El dolor ante un rechazo o abandono es normal sentirlo, pero no se quedará para siempre. Ese dolor, bien trabajado, dará paso a la aceptación y entendimiento de la situación, la única manera que tiene el ser humano para crecer y desarrollar su vida personal y espiritual.
Si entendemos que la vida es una sucesión de acontecimientos en los que a veces las cosas salen como nos gustaría y otras no, a priori, pero después se acaban convirtiendo en situaciones mejores, nuestro nivel de miedo se rebajará, dando paso a la curiosidad y apertura hacia la vida.
3. Nuestra zona de confort es la zona en la que nos sentimos cómodos, que tenemos controlada y en la que no sufrimos temor. Algunas personas tienen una zona de confort amplia y no temen cruzarla para ir ampliándola cada vez más pero a otras personas les ocurre lo contrario, van limitando su zona de confort hasta convertirla en una cárcel para ellos mismos.
Esa personas deciden no mantener relaciones sentimentales para no sufrir, instalándose cada vez más en un modo de entender la vida muy limitante. El miedo provoca eso, impide que te expongas a lo desconocido, a lo que no puedes controlar. El motivo por el que lo hace es porque cree que así estará a salvo pero se olvida de que, al final, la soledad resultante pondrá en peligro su salud, sobre todo mental, impidiéndole realizar los deseos más profundos y naturales en cualquier ser humano: la necesidad de querer y que le quieran.
4. La única manera de romper esa espiral dañina es venciendo a tus miedos y, para vencerlos, sólo tienes un camino: superarlos abriéndote al amor, siendo consciente de que el miedo que te impide conseguir tus propósitos es un enemigo en sí mismo, que te boicotea con la intención de protegerte, pero que al final solo te está perjudicando.
El miedo, cuando tiene el poder, es decir, cuando te controla, se ve como un monstruo enorme imposible de vencer. En cambio, cuando se combate y se le planta cara nos damos cuenta de que se trata de algo mucho más fácil de dominar. No te sientas mal por el hecho de tener miedo, el miedo se encarga de hacerte más fuerte.
Plantéate tus limitaciones como la única vía para mejorar, solo de esa manera podrás evolucionar como persona. Alégrate por sentirte vulnerable, entiende cuál es la naturaleza de tu resistencia (el miedo), acéptalo y lucha contra él. Es la manera que tiene la vida de mostrarte el camino, ¡síguelo!
5. La filofobia es el nombre que recibe la alteración mental relacionada con un miedo patológico al rechazo y al abandono. Este trastorno está relacionado con la ansiedad y la fobia social y, en ocasiones, puede trasladarse también más allá de las relaciones sentimentales, condicionando la vida del individuo en prácticamente todas las áreas sociales.
Las relaciones tóxicas y dañinas, los abusos y el maltrato pueden estar detrás de esta alteración, provocando que el enfermo se proteja de forma compulsiva, rechazando cualquier intimidad emocional con otra persona.
Al tratarse de un trastorno mental, debe ser tratado por especialistas y consultarse con un psicólogo o terapeuta. Si es necesario tratar síntomas como ansiedad exacerbada o depresión, el paciente será derivado a un psiquiatra. Se trata de un caso extremo, lo habitual es que el miedo pueda superarse de forma natural mediante la aceptación y los recursos propios sin necesidad de tratamiento. También se puede recurrir a los libros de autoayuda orientados a superar el miedo a enamorarse.
UC
Por Confirmado: Oriana Campos
