Donald Trump carece por el momento de asesores diplomáticos, según admitió el magnate inmobiliario hace varios días, pero ello no le ha impedido multiplicar las declaraciones extremistas sobre la política exterior que llevaría a cabo en caso de acceder a la presidencia de Estados Unidos.
Favorito para ganar la investidura republicana para las elecciones presidenciales del 8 de noviembre, este vociferante político y empresario impulsaría la construcción de un muro en la frontera con México financiado por los mexicanos.
Esto expulsaría a 11 millones de inmigrantes clandestinos, prohibiría el ingreso a los musulmanes, destruiría al grupo Estado Islámico, haría una guerra comercial a China, Japón y México, y se acercaría a la Rusia de su admirado Vladimir Putin.
Sin equipo
Hace semanas que Donald Trump está por divulgar la lista de sus consejeros en política extranjera, de la cual debería surgir su eventual secretario de Estado. Sin embargo, siempre posterga el anuncio.
El pasado martes, Trump fue interrogado al respecto por la cadena MSNBC, el precandidato republicano respondió: «Sí, hay un equipo», y posteriormente corrigió su comentario.
«Voy a montar un equipo. Me reuní con más de tres personas y conformaré un equipo cuando llegue el momento», acotó.
AFP