1.- Para comenzar a romper la rutina de pareja lo primero que deben tener muy claro es que tendrán que salir de su zona de confort. Se acabaron los días de hacer siempre lo mismo, llega el momento de innovar sin calendarios estipulados y sin normas estrictas, ¿están dispuestos a aceptar el reto? Si la respuesta es afirmativa continúa leyendo.
2.- Comiencen por hacer planes distintos cada día, pequeños cambios en la cotidianidad que les ayudarán a renovar el tiempo que comparten en pareja. Se acabaron los días de siempre postrados en el sofá, pueden comenzar por salir de casa y:
– Asistir juntos a un gimnasio, el ejercicio les ayudará a estar más a gusto y activos.
– Tomar clases de baile de cualquier disciplina que les atraiga.
– Salir a patinar dos tardes por semana.
– Realizar rutas o paseos en bicicleta.
– Ir más al cine.
– Salir a recrear la primera cita juntos ¡seguro que les trae recuerdos!
– Revisar las agendas de eventos en su ciudad y acudir a los que más les interesen.
– Iniciar juntos algún hobbie sobre un interés que tengan en común.
– Salir a hacer un picnic cuando hace buen tiempo.
– Pasear a algún lugar que tengan tiempo sin visitar.
– Quedar más con los amigos que ya no ven con tanta frecuencia.
– Comenzar algún curso de cualquier temática que les parezca divertida o les atraiga, por ejemplo cocina japonesa, clases de CrossFit, artes marciales, un idioma ¡lo que sea!
– Acudir a exposiciones acerca de los temas que más les interesen: de arte, de coches, de muebles, de artículos de segunda mano, de cerveza artesanal. La realidad es que siempre hay algo ocurriendo en las ciudades que les puede resultar interesante.
La meta es no pasar un día tras otro y otro encerrados en casa pidiendo comida a domicilio. Siempre hay algo que hacer fuera ¿por qué no animarse a probar?
MHM
Por Confirmado: Oriana Campos
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Romper la rutina de pareja no implica necesariamente salir de casa o invertir dinero en alguna actividad, hay cosas que también pueden hacer en el hogar y que les ayudarán a salir de la monotonía y divertirse juntos. ¿No se te ocurre nada?, aquí van algunas propuestas:
Realizar un fin de semana de películas temáticas: terror, ciencia ficción, animadas, infantiles ¡elijan sus favoritas! Palomitas, bebidas, chocolates y a disfrutar de ese sofá.
Cocinar algo juntos, una excelente forma de compartir.
Redecorar algún espacio de la casa de forma creativa: con materiales reciclados, pintando las paredes, lo que sea que les lleve a usar la imaginación.
Hacer un plato casero que nunca antes hayan probado.
Organizar una noche de cócteles caseros y música a todo volumen, una buena fiesta privada sin salir de casa.
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Si crees que problema de monotonía está especialmente presente en elámbito sexual, entonces en el momento de romper la rutina de pareja en al intimidad y subir la temperatura de esos encuentros. Aquí van algunas ideas:
Varía en las posturas sexuales, basta de usar siempre las mismas posiciones, el placer tiene muchas caras. Descubre cuáles son las posturas favoritas de ellas yde ellos y complace al máximo a tu pareja.
Abandona la habitación y comienza a tener sexo en otras partes de la casa, verás que diferente es.
Hazle eso que tienes tanto tiempo sin hacerle y que sabes que le gusta.
¡Disfrázate! Los juegos de roles son excitantes y divertidos, merece la pena probarlos.
Prueben algún juguete sexual que siempre les haya dado curiosidad, puede resultar muy divertido.
Incluye en tus juegos previos ingredientes eróticos para lamer y chupar como el chocolate o la crema batida, todo un clásico que siempre va bien.
Prueba el sexo en algún lugar público, puede ser una locura pero ¿por qué no intentarlo?
Regálense una escapada a algún lugar romántico y disfruten de unos días (u horas) juntos sin interrupciones.
Prepara una cena romántica o un desayuno especial.
Recupera ese apodo cariñoso que antes solías decirle. Háblale con un poco más de dulzura y no temas ser cariñoso/a.
Bésale y abrázale más ¡mucho más! No te olvides de las caricias, de los cariños y de los gestos de amor, que ayudarán a mejorar tu intimidad notablemente.
Dile lo que te gusta y lo que quieres recibir en la cama, no temas hablarle sucio o decirle todo lo que quieres que te haga. Verás lo excitante que resulta.
