Tener un hijo es una de las mayores alegrías en la vida de una mujer. Sin embargo, el embarazo puede también traer fuertes cambios en el cuerpo, lo que muchas veces afecta su autoestima. Te enseñamos cómo recuperar tu peso después de dar a luz de manera saludable y sobre todo compatible con la lactancia.
Bajar los kilos ganados durante el embarazo para muchas no es tarea fácil, en especial por las condiciones en que se encuentra el organismo después del parto y durante la lactancia.
La nutricionista de Clínica Santa María, México, Macarena Díaz, explica que si se quiere bajar de peso después del embarazo, se debe realizar después de los 6 meses post parto, ya que durante la lactancia materna el metabolismo aumenta debido a la necesidad de sintetizar leche para el recién nacido.
“Más que una dieta, lo que se recomienda en este periodo es una selección adecuada de los alimentos que se van a consumir. Es importante que una alimentación saludable sea en base a alimentos naturales, preferir preparaciones caseras”, explica la especialista.
Como regla general, es importante que los horarios de alimentación sean fijos, ya que no deben pasar más de 4 horas entre cada comida. Esto asegura que el metabolismo se mantenga con un ritmo mayor y logre asimilar de mejor manera los alimentos que ingresan a nuestro cuerpo.
Además, la dieta debe ser rica en vitaminas y minerales, alta en fibra – con un alto consumo de frutas y verduras – incluir alimentos que sean de bajo aporte de grasas saturadas (evitar las frituras y la comida chatarra) y consumir comidas que tengan un bajo aporte de sodio, por lo que es mejor evitar los alimentos embasados.
“Los requerimientos nutricionales de una madre que amamanta son mayores que los de una mujer que está en periodo de gestación, debido a que el metabolismo aumenta para la producción de leche. Este aumento de las necesidades nutricionales no quiere decir que la madre deba comer el doble de lo que comía anteriormente, sino que debe elegir la calidad de los alimentos por sobre la cantidad” enfatiza la nutricionista.
El aumento del requerimiento nutricional, explica, se puede cubrir tomando 2 tazas extra de lácteos bajos en grasa, así como con un mayor consumo de frutas y verduras.
Este régimen de alimentación debe ser complementado con una rutina de actividad física de por lo menos 30 minutos diarios o 1 hora tres veces por semana./YG
Fuente:Agencias