Ya es oficial: el Proyecto Orion de la NASA, cuyo objetivo es el de enviar humanos a Marte, va por buen camino.
La mañana del viernes 5 de diciembre, se ha realizado con éxito un vuelo de prueba. En esta ocasión, el vuelo sólo llevaba equipos de pruebas y algunos accesorios pero, en última instancia, la NASA planea introducir seres humanos en pequeñas cápsulas espaciales y enviarlos a Marte.
Por supuesto, el envío de una persona al planeta rojo requiere una cantidad nada despreciable de planificación y logística. Los pasos previstos son:
En 2017 o 2018: Próximo vuelo de Orion, que consistirá en un carguero robótico y hará un viaje alrededor de la luna y volverá.
En 2021: Se prevé que despeguen en un vuelo de prueba los primeros viajeros espaciales humanos del proyecto.La NASA no ha compartido ningún detalle acerca de cómo será el primer vuelo de prueba tripulado, pero se cree que debería incluir una visita a un asteroide.
Todos estos viajes lejanos son posibles gracias a una nueva tecnología de la NASA llamada Sistema de lanzamiento espacial (SLS).
Según la agencia espacial, el SLS «proporcionará a la nación un medio seguro, asequible y sostenible de ir más allá de nuestros límites actuales y abrir nuevas puertas de descubrimiento desde el punto de vista único del espacio».
El cohete, diseñado para la exploración espacial, es un vehículo sucesor del cohete Saturn V, que llevó a la raza humana a la Luna en los años 60.
En el vuelo de prueba realizado recientemente, el SLS pesaba 70 toneladas e incluía un cohete central con otros cohetes de refuerzo. El cohete llevaba una cápsula espacial, un sistema para abortar el lanzamiento y equipo suplementario.
Ahora, los científicos de la NASA se enfrentan a un gran desafío: construir unas cápsulas que lleven humanos a Marte.
Actualmente, la NASA está investigando cuál podría ser el mejor diseño para una cápsula espacial destinada a transportar astronautas a Marte. No hay duda de que esa cápsula será considerablemente más compleja que la utilizada en el vuelo de prueba; la NASA dice que el sistema final podría tener hasta 130 toneladas de peso.
Fuente: Avances tecnológicos