Las marcas o cicatrices en la piel son mucho más comunes de lo que puedan imaginar. Se producen después de heridas, acné o pequeños granos que quitamos sin cuidado y, en ocasiones, aunque cuidemos de ellos acaban dejando marcas igualmente.
Entonces, ¿qué hacer? Lo primero que conviene resaltar es qué no hacer una vez que la herida en cuestión ya es parte de la piel. En este sentido, los expertos coinciden al unísono en sus recomendaciones.
Sol: Nunca dejen que el sol dé directamente sobre cualquiera de sus cicatrices. No hay peor enemigo que él. Las oscurece y por consecuencia, se vuelven más complicadas de sacar. Salgan siempre con protección solar, especialmente en verano, cuando el sol es más fuerte.
Cuidado de la herida: Siempre cuiden de la herida desde el primer momento. Por muy pequeña que sea. “Cuando se produce una herida, debe ser tratada de forma inmediata, limpiando y desinfectando la zona”, dicen los expertos.
Jamás quiten una costra: Suele ser una de las grandes equivocaciones, creer que como casi se ha caído podemos tirar un poco de ella… ¡Error! Nunca saquen una costra porque tendrán más posibilidades de que sus marcas acaben formando parte de ustedes.
*Remedios caseros:
Sí, hay muchos remedios que conviene que tengan en cuenta. Y lo más importante, no supondrán un gran estrago para sus bolsillos, así que pongan manos a la obra. Aquí les ofrecemos algunos consejos con la ayuda de varios especialistas.
1. Zumo de limón: Este ingrediente debe ser un must en sus cocinas. “Expriman su zumo y mézclenlo con dos cucharadas de leche. Unten esta mezcla en la zona y cuando se seque, apliquen la pulpa de un tallo de aloe vera, para después cubrir con una gasa o un apósito. Dejen actuar toda la noche y por la mañana apliquen una crema hidratante”.
2. Miel: Preparen una mezcla con miel y una cucharada de azúcar. Masajeen la zona con movimientos circulares y después enjuaguen.
3. Leche: “Hiervan medio litro de leche, retiren la nata y guárdenla en la nevera hasta que quede sólida. Colóquenla sobre la herida durante 20 minutos, sujetando con una venda. Repitan cada día hasta que vean que la herida desaparece.
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