Un comité de la alianza petrolera OPEP+, liderada por Arabia Saudí y Rusia, evaluará este lunes en una teleconferencia si la situación actual del mercado justifica un reajuste de su oferta conjunta de crudo.
Pese a las recientes turbulencias causadas por la crisis bancaria y las previsiones de una vigorosa demanda de «oro negro» para este año, la mayoría de los analistas estiman que no habrá cambios con respecto al nivel de la producción del grupo de 23 países.
Seguiría vigente así en los próximos meses el fuerte recorte de las extracciones que, fijado en octubre en 2 millones de barriles diarios (mbd), dejó la cuota conjunta de bombeo en 41,85 mbd.
Tras caer el 20 de marzo a menos de 71 dólares por primera vez desde 2021 debido a la crisis bancaria, el precio del barril de Brent ha vuelto a la tendencia alcista, hasta rozar los 80 dólares el pasado viernes.
El petróleo intermedio de Texas (WTI), que había descendido hasta menos de 68 dólares, cerró marzo a 75,67 dólares/barril.
En medio de las recientes turbulencias bancarias en Estados Unidos y Suiza, el ministro de Energía saudí, Abdulaziz bin Salmán, y el viceprimer ministro ruso Alexander Novak reafirmaron su compromiso con el recorte adoptado en la OPEP+.
Reunidos el 16 de marzo en Riad para preparar el encuentro del Comité Conjunto de Supervisión Ministerial (JMMC, por sus siglas en inglés) previsto para mañana, Novak y Bin Salmán resaltaron además su intención de estrechar las relaciones bilaterales entre sus dos países.
Si bien el JMMC es un órgano asesor sin competencias para adoptar decisiones, se espera que los mercados sigan de cerca el encuentro, dado que Arabia Saudí y Rusia son de lejos los mayores productores de crudo del mundo, superados a nivel mundial solo por Estados Unidos.