La comisión parlamentaria británica que analiza el «Brexit» considera que los controles fronterizos entre Irlanda e Irlanda del Norte tras la salida de Reino Unido de la Unión Europea serán inevitables.
«Actualmente no vemos cómo será posible conciliar la ausencia de frontera con la política del Gobierno que prevé abandonar el mercado único y la unión aduanera», señala la comisión en un informe publicado este viernes.
Las propuestas del Gobierno en Londres de realizar los controles con ayuda de la última tecnología y sin puestos fronterizos «no han sido probadas y son hasta cierto punto especulativas», según el informe.
La República de Irlanda, en el sur de la isla, es miembro de la UE y tras la salida de Reino Unido se establecerá una nueva frontera exterior entre el país e Irlanda del Norte.
Hasta ahora la linea divisoria es prácticamente invisible y se puede traspasar sin problemas. Los expertos temen que el denominado «Brexit» a finales de marzo de 2019 tenga graves consecuencias para la economía y creen que el proceso de paz entre los católicos y los protestantes en la región podría verse amenazado. (dpa)
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