Autoridades de Colombia y Estados Unidos confiscaron 2,3 toneladas de cocaína transportadas en una nave semisumergible interceptada en aguas internacionales del Océano Pacífico, después de una persecución de varias horas con aviones y barcos de guerra, informó el martes la Armada del país sudamericano.
El sumergible, construido en fibra de vidrio, había zarpado de una playa próxima a una región selvática y era tripulado por dos colombianos y un ecuatoriano que fueron capturados.
La nave fue detectada desde el aire y su trayectoria fue comunicada a las autoridades militares que lograron interceptarla.
La droga confiscada tiene un valor de 71 millones de dólares en el mercado internacional, precisó la armada que atribuyó la propiedad del cargamento a las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), versión que no pudo ser confirmada con fuentes independientes.
El grupo rebelde que mantiene una negociación de paz con el Gobierno de Colombia en Cuba, logró el viernes un acuerdo en el que se comprometió a poner fin a cualquier relación con el narcotráfico, que según el Gobierno es el combustible que alimenta el violento conflicto interno que ha dejado 200.000 muertos en medio siglo.
Guerrilleros, bandas criminales conformadas por antiguos paramilitares de derecha y narcotraficantes están involucrados en la producción y el tráfico de cocaína, de acuerdo con fuentes de seguridad.
Colombia es considerado uno de los principales productores mundiales de cocaína con unas 300 toneladas anuales que se envían a los mercados de Estados Unidos y Europa.
Las autoridades del país sudamericano confiscaron más de 166 toneladas de cocaína en el 2013. Desde 1993, cuando se comenzaron a utilizar para el transporte de cocaína, Colombia ha interceptado 83 sumergibles.
Fuente: Agencias
