“Cualquier agresión, alteración, o generación de violencia conllevará a la suspensión inmediata del proceso hasta que se restablezca el orden”, así lo advirtió Tibisay Lucena en comparecencia de prensa desde el CNE, donde ratificó que el proceso de validación de firmas será entre el 20 y el 24 de junio en las sedes de las oficinas regionales electorales.
El pronunciamiento de Lucena se produjo en el cierre de una semana convulsionada por manifestaciones callejeras, opositoras y chavistas y agresiones a diputados de la Mesa de Unidad (MUD).
Antes de la validación de las firmas, habrá un proceso de exclusión que se dará del 13 y el 17 de junio, dijo Lucena, quien confirmó que 1.352.052 irán a validación. Mientras que 605.727 no cumplieron los criterios establecidos.
Entre las irregularidades expresadas se cuentan “la firma de 3.003 menores de 18 años, 1.335 inhabilitados políticos, 659 con serial anulado y 3 personas con interdicción civil (problemas mentales).
Tras la validación de firmas con huella dactilar, el CNE se tomará 20 días hábiles para revisar el proceso, hasta el 23 de julio, detalló Lucena. En el caso del Zulia, la validación y exclusión (para esta última hay que bajar la planilla de la página web del CNE) se dará en la Oficina Regional Electoral, en La Barraca.
Minutos después del pronunciamiento del Poder Electoral, se sucedieron uno tras otro los actores políticos.
Con el chavismo advirtiendo que recurrirá al Poder Judicial y la oposición cuestionando “las trabas” y exclusiones de algunos de sus líderes.
“Lo primero que vamos a hacer es que vamos a la Sala Constitucional (del TSJ) para denunciar este delito contra la Constitución”, dijo Jorge Rodríguez, delegado por el presidente Nicolás Maduro para supervisar el proceso que busca sacarlo del poder.
Rodríguez señaló que durante el recaudo hubo una serie de irregularidades que configuran un “fraude”, como la inclusión de rúbricas de personas fallecidas, menores de edad e inhabilitados políticamente.
El dirigente opositor Henrique Capriles, principal impulsor del referendo, denunció que en la lista de apoyos publicada por el CNE aparece como “no firmante”, pese a que según él cumplió con lo indicado.
Capriles insistió en que el CNE “ha violado la norma una y otra vez, lo que hizo el CNE fue pisotear la manifestación de voluntad del pueblo”.
El primer vicepresidente de la AN, Enrique Márquez, quien también denunció su exclusión de las firmas, planteó que “se permita validar a aquellas personas que fueron excluidas”.
A juicio del diputado, “no hay ninguna razón para que el Psuv demande un proceso que más bien está siendo avalado por el propio Consejo Nacional Electoral”.
Las cartas están echadas para el referendo revocatorio, el Psuv asomó ayer su jugada principal, el TSJ; la oposición advirtió que seguirá en la calle para presionar al árbitro.
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