El portero y capitán de Chile disputará la final de la Copa Confederaciones este domingo ante Alemania
El capitán de la selección chilena de fútbol, Claudio Bravo, reivindicó hoy los logros de su equipo y aseguró que el grupo que lidera quiere dejar un legado para el futuro, después de encadenar tres finales seguidas desde 2015, destacó DPA.
«Pasamos a la final, pero no es sinónimo de celebrar todavía. Nosotros tenemos las metas altas. Y eso significa también ganar el título», dijo el arquero del Manchester City en San Petersburgo, donde el domingo Chile jugará la final de la Copa Confederaciones ante Alemania.
«Cuando éramos más chicos y Alexis decía que quería ser el mejor del mundo o yo que quería ganar un título con la selección, muchos reían, decían que era imposible, pero acá estamos sentados nuevamente antes de una final», agregó.
Chile no había ganado ningún título hasta la victoria en casa en la Copa América de 2015. Después, se impuso también en la Copa Centenario de 2016 en Estados Unidos y aspira ahora a enlazar su tercer título consecutivo en Rusia.
«Tenemos que proteger esto, que perdure, tratar de dejar un legado, que empiecen a aparecer jugadores nuevos con esta misma mentalidad, que aspiren a más cosas, que se rompa esa barrera del miedo», dijo.
«El miedo siempre viene de ese lado», agregó apuntando a los periodistas. «Antes del partido con Portugal se hablaba más de Cristiano Ronaldo que de nuestros grandes jugadores. Siempre estamos más preocupados de las otras selecciones, de los otros jugadores. Minimizamos lo que nosotros tenemos. Pero bueno, estamos nosotros solos en este mundo del fútbol», señaló.
El portero de 34 años cree que la selección chilena ha «crecido como grupo» en los últimos años.
«No todos somos amigos, pero nos respetamos desde hace mucho tiempo atrás. Sabemos que a la hora de trabajar funcionamos como si fuéramos íntimos», explicó. «El tiempo nos ha dado la razón, en base a valorarnos como profesionales hemos conseguido revertir muchos años de sequía. Estamos en un escenario de privilegio y es una oportunidad mágica».
En cuanto a la final del domingo, Bravo espera un partido similar al que se vio en la fase de grupos, en el que Chile y Alemania empataron 1-1.
«Yo veo un partido abierto, con dos selecciones que proponen, que tienen gol. En la final no puedes renunciar a tu faceta. Tenemos muy claro cuál es nuestro papel y nuestro fútbol. Si renunciáramos no tendríamos ningún margen de ganar. Y ellos igual», advirtió el ex del Barcelona.
Por Confirmado: MariGonz
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