El Paris Saint Germain (PSG) ha conseguido las autorizaciones ambientales y los permisos de construcción para su futuro campus de entrenamiento y formación de 74 hectáreas, con lo que se espera su apertura en el verano de 2022, un año después de la fecha inicialmente prevista.
Tras tres años de procesos administrativos, Karl Olive, el alcalde de la localidad de Poissy, al oeste de París, donde está programada la ciudad deportiva, ha firmado los permisos de construcción. Se crearán 300 empleos permanentes y unos 1.000 durante las obras.
El campus, situado a 25 minutos del estadio del PSG, el Parque de los Príncipes, supondrá, si se mantienen las previsiones, una inversión de entre 250 y 300 millones de euros.
Reemplazará el actual que se estima «no adaptado» a los objetivos del club y contará con diecisiete campos de fútbol, alojamientos para los jugadores profesionales y los jóvenes en formación, además de un centro médico para las rehabilitaciones y un estadio de 3.000 plazas.
Las instalaciones permitirán acoger a 180 deportistas profesionales cada año y no estarán exclusivamente reservadas al primer equipo de fútbol, también a los de reserva y a los femeninos. Además, 4.000 metros cuadrados se dedicarán para balonmano y habrá dos dojos para yudo.
La dirección del PSG señaló en un comunicado que esas instalaciones serán «un destino deportivo de alta calidad para atletas y talentos de todo el mundo», y «un elemento clave de la estrategia de desarrollo del club».
Las obras comenzarán en la primavera de 2020 con la intención de tenerlo listo para la temporada 2022-2023.
El PSG obtuvo 540 millones de euros de ingresos en 2018, cinco veces más que en 2011, cuando lo compró Qatar Sports Investments (QSI), propiedad del fondo soberano de Catar, lo que permitió al equipo esquivar un agujero financiero de más de 100 millones de euros.
EFE