El concepto de reutilizar es en muchos casos es mas ecológico que el reciclaje, requiere de poca o ninguna energía, se utilizan procesos que no necesitan mucha tecnología.
Existen muchos productos no se reciclan, por no resultar rentable. Sin embargo muchos se pueden reutilizar fácilmente evitando la compra de productos nuevos para ese uso en particular y por último pero no menos importante en estos tiempos, ahorramos algo de dinero.
Hoy les traemos unos ejemplos de algo que normalmente se usa y mucho, como son las bolistas de té o infusiones (si usamos directamente hojas de té o infusiones que es mucho mas ecológico y barato también sirven estos consejos). Algunas de las formas de reutilización pueden ser complementarias por lo que podemos llegar a hacer dos o tres cosas distintas con un mismo saco de té.
Primera opción, el té o infusiones y las plantas:
Las plantas adoran la comida y los residuos de té (de ahora en adelante solo mencionaremos té pero también pueden ser infusiones, té verde, rojo, yerba mate, etc.) resultan una excelente comida para nuestra plantas, por lo que podemos utilizarlas de varias formas. Se pueden mezclar directamente en la tierra, o enterrarlas; se pueden usar a modo de manto vegetal, que además como ya hemos visto otras veces ahorra agua, la rompemos y vamos cubriendo la superficie de la tierra con las hojas de té, si no utilizamos sacos, vaciamos directamente el contenedor de la hojas en la maceta. Otra forma es hacer un segundo té, que saldrá débil, aguado pero no es para nosotros; esperamos a que enfrié y lo usamos para regar, también cuando nos sobra se nos olvida la taza por ahí, se enfría y hasta puede que le salgan hongos; en lugar de tirarlo al fregadero dáselo a tus plantas y verás que le gusta el té mas que a los Ingleses. Otra opción es utilizarlo directamente en el compost, el té aporta varios minerales a la tierra.
Segunda opción, desodorante del refrigerador:
ponemos varios sacos en algún contenedor donde puedan respirar, puede ser por ejemplo un envase viejo de manteca, al que le haremos varios agujeros y ponemos dentro el té; este ira absorbiendo los malos olores de la heladera. También podemos usar bicarbonato para este fin, pero el té usado es gratis.
Tercera opción, tratamientos de la piel, bolsas en los ojos, picaduras de insectos, anti-inflamatorio.
El té, tiene una pequeña parte de ácido tánico que funciona como anti-inflamatorio, lo que lo hace útil para todos estos usos antes mencionados; podemos tener siempre alguna bolsita en la heladera para usarlo en caso de necesidad, con lo que estaríamos dándole dos usos ya que también captaría los malos olores como vimos en el punto anterior.
Cuarta opción, tintura de telas:
Desde hace siglos el te ha sido utilizado para teñir tela. Le da a la tela blanca un tinte como antiguo o sepia, que puede ser bastante frío. También se utilizan bolsas de té, para los blancos grises o darle vida a un proyecto de artesanía, incluso puede servir para teñir madera. También hay quien usa el te para teñir el pelo.
Quinta opción, hacer mas té:
El proceso es sencillo: hacemos el té, guardamos la bolsa; hacemos un segundo té y separamos otra vez las bolsa. Cuando llegue el momento de hacer el tercero en vez de sacar otra bolsa de la caja usamos las dos bolsas reservadas, con lo que ahorramos una tercera parte de las mismas. Si gastamos, por ejemplo, tres cajas al mes, haciendo algo tan sencillo,como lo propuesto gastaríamos tan solo dos, y una vez reutilizados, podemos volver a usarlos para las plantas como vimos en primera instancia.
Fuente: Creadess