Las autoridades de la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, elevaron este jueves a 22 el número de muertos que el miércoles dejó un ataque con dron estadounidense.
Asimismo, precisaron que las primeras investigaciones indican que 18 eran miembros del Estado Islámico y cuatro eran civiles.
El portavoz del gobernador de Nangarhar, Attaullah Khogyanai, indicó a Efe que de acuerdo a la investigación que realizan sobre el terreno en Achin, distrito en el que se produjo el ataque, ese es el recuento de muertos de la operación que causó además ocho heridos.
Señaló que un juez del EI Hajji Muhammad y un comandante local de nombre Hamza están entre los muertos.
«El tema de los muertos civiles todavía no es definitivo, ya que nuestra investigación sigue en marcha».
Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, en un comunicado difundido la noche de este miércoles, revelaron que no entrarán en detalles sobre «la operación antiterrorista llevada a cabo en Nangarhar», debido a que están «todavía revisando las pruebas relacionadas con el bombardeo».
En la nota, insistieron en que toman «todas las precauciones posibles» para evitar víctimas civiles en las operaciones y continuarán trabajando con las autoridades afganas para determinar si hay motivos para proseguir con la investigación.
La provincia de Nangarhar continúa siendo el principal bastión del Estado Islámico en Afganistán, aunque su presencia ha ido disminuyendo de manera progresiva fruto de la acción de las tropas afganas e internacionales.
Fuente: Globovision