La delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desplazada a Perú llegó este jueves a la ciudad de Juliaca, donde el lunes murieron 17 manifestantes y un policía en la jornada más sangrienta desde que estallaron las protestas antigubernamentales hace un mes.
La comitiva de este organismo autónomo de la Organización de Estados Americanos (OEA), liderada por el vicepresidente y relator para Perú, Stuardo Ralón, tenía inicialmente previsto sostener varios encuentros en las ciudades de Lima, Arequipa e Ica, donde el miércoles llegó un grupo integrado por el relator especial para la libertad de expresión, Pedro Vaca.
Pero, según informó este jueves la CIDH a través de Twitter, la delegación consiguió finalmente llegar también a Juliaca, ubicada en la sureña región de Puno, colindante con Bolivia.
«(La) delegación de CIDH está en Lima, Arequipa y Juliaca. Los comisionados Stuardo Ralón y Joel Hernández, junto al equipo técnico, se reúnen con autoridades y amplios sectores sociales para recibir información sobre las protestas sociales y el contexto actual», informó el organismo.
Juliaca, ubicada a unos 1.300 kilómetros de Lima, fue escenario el lunes de la jornada más sangrienta desde que iniciaron las protestas en diciembre pasado en Perú, tras unos enfrentamientos entre manifestantes y policías que se saldaron con la muerte de 17 personas, entre ellas un menor de edad.
Esta ciudad andina, cuyo aeropuerto permanece cerrado, ha sido el epicentro de las movilizaciones que exigen la renuncia de la presidenta, Dina Boluarte, el cierre del Congreso y nuevas elecciones en 2023 desde que se retomaron las protestas el pasado 4 de enero, tras la tregua navideña.
El miércoles, los manifestantes de Juliaca pararon sus movilizaciones para rendir un homenaje público y masivo a los 17 manifestantes fallecidos el lunes, con una procesión con los ataúdes por el centro de la ciudad y una misa comunitaria.
Hasta la fecha, las protestas en Perú suman un saldo de 48 personas fallecidas, entre ellas, un policía, y centenas de heridos.
La delegación de la CIDH llegó este miércoles a Perú con el objetivo de observar la situación de los derechos humanos en las protestas y comenzó su visita con una reunión con Boluarte en el Palacio de Gobierno.
Tras ese encuentro, Ralón declaró que la idea de la misión es «tener la escucha más amplia posible de todas las voces» de la sociedad civil, a través de una agenda «enfocada a desplazarse fuera de Lima».
La delegación dará una rueda de prensa el viernes, al término de su visita al país, para adelantar sus conclusiones.
EFE