Chevron y Valero Energy negocian acuerdo para reanudar envío de crudo venezolano a EE UU

Chevron y Valero Energy negocian acuerdo para reanudar envío de crudo venezolano a EE UU

Las compañías esperan reanudar este mes las transferencias barco a barco frente a la isla de Aruba, una modalidad empleada previamente para enviar crudo desde la empresa mixta Petroboscán

Chevron y Valero Energy están negociando los términos para reactivar un acuerdo de suministro de crudo pesado venezolano destinado a refinerías en Estados Unidos, tras la reciente emisión de una licencia restringida por parte del Departamento del Tesoro estadounidense.

Las compañías esperan reanudar este mes las transferencias barco a barco frente a la isla de Aruba, una modalidad empleada previamente para enviar crudo desde la empresa mixta Petroboscán, según confirmaron a la agencia Reuters tres fuentes cercanas a los preparativos.

La reanudación de este intercambio coincide con el anuncio de Chevron, que a finales de julio informó su intención de volver a exportar petróleo venezolano en volúmenes reducidos. La estatal Pdvsa, por su parte, deberá asignar los cargamentos correspondientes.

¿Qué se sabe sobre la licencia restringida otorgada a Chevron?

En el primer trimestre de este año, antes de la revocatoria de la Licencia General No. 41, Chevron llegó a garantizar a Valero Energy un flujo de hasta 50.000 barriles diarios de crudo Boscán desde Aruba, según datos marítimos. Este suministro fue fundamental para evitar recortes en la producción de Petroboscán, que enfrenta limitaciones de almacenamiento.

Sin embargo, la nueva autorización otorgada por la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC) impone restricciones significativas que limitan el impacto económico que tuvo el llamado “efecto Chevron” en 2023.

“El permiso concedido por la OFAC reduce significativamente los alcances que tenía la Licencia General No. 41”, indicó una fuente del sector citada por el portal especializado Petroguía.

Entre los cambios más relevantes, se restringen los mecanismos de pago con petróleo, lo que reduce el volumen de exportación hacia Estados Unidos y, en consecuencia, los ingresos en divisas que se inyectaban al mercado cambiario venezolano a través de la banca privada.

Aunque se mantienen aspectos previamente autorizados, como la importación de diluyentes estadounidenses para el mejoramiento de crudos pesados, la nueva licencia conserva limitaciones en materia tributaria. Las empresas mixtas seguirán asumiendo individualmente la declaración y pago de regalías e Impuesto Sobre la Renta (ISLR).

También sigue vigente la Licencia General 35, que permite a Chevron y a otras empresas estadounidenses realizar pagos por impuestos, permisos y servicios públicos en Venezuela, siempre que estén relacionados con sus operaciones habituales.

Aún persiste el hermetismo por parte de la administración de Donald Trump sobre los detalles de la aplicación de un arancel de 25% a países que importen petróleo venezolano, medida que golpearía principalmente a China, el principal destino actual del crudo de Pdvsa.

Con la reactivación parcial de operaciones bajo la nueva licencia, se espera que Venezuela pueda disponer de más crudo para el mercado asiático, una estrategia que se ha consolidado desde que Washington impuso las sanciones en 2019.

 

EN

Comparte esta noticia: