Carlos Ocariz, negociador de la oposición en el diálogo, aseguró este martes que el gobierno miente al decir que nunca se planteó en la mesa la salida del presidente Nicolás Maduro y afirmó que «desde el primer día» propusieron unas elecciones adelantadas o la activación del revocatorio.
El alcalde del municipio Sucre dijo que estaba «muy sorprendido» por la afirmación del diputado chavista Elías Jaua, negociador por parte del gobierno, que aseguró ayer que ese asunto no ha sido planteado formalmente en la agenda.
«Jaua miente, porque desde el primer día, en la primera reunión, en la primera interacción que tuvimos, y hay testigos, lo que hace mayor el descaro, el punto que llevamos fue la celebración de unas ‘megaelecciones’ adelantadas, y el otro era la activación del refereéndum revocatorio que nos secuestraron», afirmó Ocariz.
«Nuestra agenda siempre ha sido electoral, y estamos sentados allí justamente para solicitar una salida electoral a la crisis que tenemos en el país», insistió Ocariz, quien espera que Jaua se retracte.
La reactivación del revocatorio presidencial o las elecciones generales adelantadas son parte de una propuesta que está en manos de la contraparte. «Estamos esperando respuesta, esperamos que el 6 de diciembre tengamos definiciones», indicó en referencia a la fecha prevista para la próxima plenaria de la mesa de diálogo.
Sin embargo, evitó ofrecer precisiones al respecto que puedan hacer «ruido en el acuerdo».
Al igual que Jaua, Ocariz asegura que sus afirmaciones podrían ser corroboradas por los mediadores de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) o del Vaticano que asisten al diálogo.
El alcalde opositor resumió que entre los puntos que reclama la oposición figuran la salida electoral, la renovación de las autoridades electorales, la elección de cuatro diputados del estado Amazonas cuya elección fue invalidada en las últimas legislativas, el respeto al Parlamento, la liberación de los presos políticops y la apertura de un canal humanitario.
Otro aspecto en el que Ocariz asegura que el oficialismo miente es justamente el de las liberaciones de los opositores que se encuentran encarcelados y para quienes la MUD reclama su liberación por considerarlos «presos políticos».
La puesta en libertad del alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, era un asunto que los opositores afirmaron haber conseguido en el diálogo y que, según ellos, debía salir de su arresto domiciliario el pasado sábado, aunque Jaua precisó que «la mesa no libera personas».
El negociador opositor evitó referirse a nombres puntuales de políticos que podrían ser liberados gracias a las conversaciones, pero aseveró que hay un acuerdo que el gobierno no está cumpliendo en general en todos los puntos y confió en que los mediadores pidan explicaciones.
Sostuvo que la oposición ha cumplido con todo lo que se prometió, y que por el contrario el gobierno no ha respetado su palabra, un señalamiento que también ha hecho los representantes gubernamentales.
«Los que están ahí sentados saben con lo que ellos se comprometieron y saben que no han cumplido», dijo.
La razón por la que, a su juicio, el gobierno estaría incumpliendo es porque en este momento está «muy dividido». «Están los que quieren y no pueden y están los que pueden y no quieren».
«En este momento estamos allí, por supuesto que estamos muy preocupados y a la expectativa de que cumplan, y preocupados que no lo hayan hecho hasta ahora», señaló Ocariz en cuanto a la actitud de la delegación opositora ante la mesa creada para aliviar la crisis del país.
La permanencia de los delegados opositores en las conversaciones está sujeta al objetivo de lograr «que el gobierno cumpla o definitivamente se quite la careta y diga que no va a cumplir con nada, en ese momento tomaremos la decisión como Mesa de la Unidad Democrática», explicó.
«Nosotros estamos esperando que cumplan, por eso le hemos dicho a la Unasur que se pongan los pantalones», agregó en referencia al supuesto incumplimiento del gobierno.
A este punto el delegado de la MUD no vislumbra una fecha precisa para un acuerdo definitivo, sin embargo, ofrece «certeza» de que defienden «los derechos de los venezolanos» y que serán «transparentes con las cosas que pasen allí adentro».
«Ahora certeza de que el gobierno cumpla no la podemos dar», concluyó.
Fuente: El Nacional