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Cáritas Venezuela advierte que el 17 % de la población venezolana está en situación de hambre

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Cáritas Venezuela advierte que el 17 % de la población venezolana está en situación de hambre

Susana Raffalli, asesora en nutrición de Cáritas Venezuela, destacó que a pesar de la mejora en los indicadores de oferta alimentaria en el país, el 17 % de la población venezolana, es decir, unos 5 millones de personas, continúa en situación de subalimentación o hambre, según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

 

Durante una entrevista para Radio Fe y Alegría Noticias, Raffalli advirtió que aunque esta cifra es menor que el 21 % registrado entre 2017 y 2019, triplica el promedio de subalimentación en América del Sur, que es del 6 %.

 

La experta en nutrición explicó que el acceso a los alimentos y la capacidad del país para abastecerse de productos nacionales son factores determinantes en el porcentaje de población en situación de hambre.

 

Además, reveló que entre 8 y 10 de cada 100 niños que reciben ayuda de Cáritas padecen desnutrición grave, y el 25 % de las mujeres están en riesgo nutricional, con un alarmante 77 % de las embarazadas que sufren también de anemia.

Factores que agravan la crisis alimentaria

 

Susana Raffalli mencionó tres factores que siguen deteriorando la capacidad de los venezolanos para alimentarse adecuadamente. En primer lugar, el elevado costo de la canasta básica, que supera con creces los ingresos familiares, incluso si se suman los bonos estatales y los productos de las cajas CLAP, que no logran cubrir ni el 30 % de las necesidades de una familia de cinco personas. Los hogares que reciben divisas son los que se encuentran en mejores condiciones, dado que el bolívar, aunque estabilizado tras la salida de la hiperinflación, sigue siendo insuficiente.

 

Otro factor crítico es la falta de servicios básicos, como electricidad, agua y gas, que impiden a muchas familias cocinar adecuadamente.

 

Raffalli señaló, como tercer factor, que a pesar de que muchas familias dependen de las cajas CLAP, estas solo se distribuyen trimestralmente, en la mayoría de los casos, y contienen alimentos de bajo valor nutricional, lo que puede aumentar las enfermedades metabólicas.

 

Estrategias de supervivencia y consecuencias

 

La asesora de Cáritas Venezuela describió cómo muchas familias recurren a estrategias desesperadas para sobrevivir, como depender de las cajas CLAP o reducir la calidad y cantidad de los alimentos que consumen. Además, algunas personas se ven obligadas a endeudarse o involucrarse en actividades ilícitas para generar ingresos adicionales. La migración, señaló, ha vuelto a aumentar debido a la grave situación.

 

Las consecuencias de la crisis alimentaria van más allá de la nutrición. Raffalli destacó que problemas como el desempleo, la explotación laboral, el trabajo infantil y la exposición a redes de trata son parte de las terribles secuelas. La salud también se ve gravemente afectada con retrasos en el crecimiento y problemas cognitivos en los niños.

 

Fuente: El Pitazo

 

 

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