Según el análisis de Asdrúbal Oliveros, director asociado de Ecoanalítica, se prevé que en el transcurso de los próximos 81 días, previos a las elecciones presidenciales del 28 de julio en Venezuela, el gasto público experimentará un incremento que, aunque superior al promedio, no se considera extraordinariamente alto.
Este aumento en el gasto se manifestará principalmente a través de bonificaciones, las cuales tendrán un efecto generalizado en la economía. No obstante, se espera que los primeros beneficiados sean los sectores de alimentación, salud y productos de higiene personal.
“Estos sectores no han tenido una caída significativa en términos agregados del consumo” y podrían experimentar un crecimiento, afirmó Oliveros durante una entrevista otorgada a Unión Radio.
Oliveros subrayó la importancia de monitorear la inflación y el tipo de cambio en este periodo crítico. A medida que se intensifique la ejecución del gasto público, se inyectarán más bolívares en la economía, lo que podría generar una presión sobre el cambio monetario y un aumento en la inflación.
“Ese es el costo de mayor gasto y un poco más de movilidad en el consumo, que tengamos algo de presión cambiaría y de inflación”.
Ante este panorama, Oliveros aconsejó a las compañías implementar tácticas financieras defensivas para protegerse contra los efectos de la devaluación y la inflación, con el objetivo de prevenir impactos negativos significativos en sus estados financieros.
Con información de Finanzas Digital.