La reconocida actriz Cameron Diaz se alejó de las cámaras y el mundo del cine, en 2014, porque quería dedicarse a su vida personal y familiar. Tiempo después, tuvo una niña gracias al método de vientre por alquiler. Ahora, la antigua modelo ha podido dedicarse de lleno a su familia.
Junto a su esposo, Benji Madden, integrante de la banda Good Charlotte, y Raddix, su hija, han optado por una vida tranquila, disfrutando de que pueden vivir gracias a los años trabajados cuando eran jóvenes.
Además, Diaz es la dueña y fundadora de una marca de vinos llamada Avaline, así que continúa trabajando fuertemente, eso sí, lejos de las cámaras. Sin embargo, ser madre ha sido el rol más exigente hasta la fecha.
Cameron Díaz y su vida tras convertirse en madre
En una entrevista reciente, la mujer contó cómo el ser madre la ha ayudado a desligarse de los ‘pensamientos tóxicos’ de Hollywood relacionados con la belleza y el ser mujer.
De acuerdo con la actriz, la maternidad la ha ayudado a reforzar su autoestima y a aceptarse tal y como es, sin importar la edad: «Lo último en lo que pienso todos los días, quizás no en absoluto durante el día, es en mi aspecto», confesó la actriz retirada en el podcast ‘Rule Breakers’ de Michelle Visage.
Y añadió: “Las mujeres que tienen hijos de la edad de mi hija tienen, literalmente, como 20 años menos que yo. Es interesante porque yo no estoy ahí. Y eso está totalmente bien. Pero quiero sentirme vital por mi hija”.
Presionada a cumplir con expectativas de belleza
Además, también reconoció que cuando era una joven estrella se sentía presionada a cumplir con las expectativas de belleza que impone Hollywood. Ahora, desea relacionarse con su cuerpo y cómo se ve este de una manera diferente.
“No quiero que se trate de cómo me veo… Mi cuerpo es fuerte, mi cuerpo es capaz. ¿Por qué tratarlo con crueldad si me ha traído hasta acá?”, explicó Cameron Díaz.
Aunque sabe que es una madre primeriza bastante mayor, su interés es poder aprovechar su cuerpo sano al máximo y ser una madre enérgica para su pequeña.
Fuente: 2001