Los caraqueños, por tercera noche consecutiva, salieron a las calles, olla en mano, para protestar por la negativa del Consejo Nacional Electoral (CNE) de realizar el reconteo voto a voto de la recién celebrada elección presidencial, donde el candidato de la Unidad, Henrique Capriles Radonski, denunció unos 3.500 casos irregulares que afectarían a más de un millón de votos.
Ollas, tapas viejas, cucharillas, palas, postes de luz, latas vacías, todo lo que hiciera ruido, sirvió para alzar la voz de protesta y manifestar rechazo a la rápida proclamación del candidato oficialista, Nicolás Maduro, por parte de la presidenta del CNE, Tibisay Lucena.
Las cacerolas se oyeron en Petare, Los Ruices, La Urbina, El Marques, Chaguaramos, Macaracuay, Santa Mónica, Chacao, Valle Abajo, El Valle, Coche, Caricuao, Las Acacias, Campo Rico, Los Rosales. Cumbres de Curumo, Santa Fe y El Cafetal. Todas arrancaron puntualmente a las 8:00 de la noche. Algunos salieron a las calles y se colocaron en las aceras. Otros prefirieron quedarse desde sus ventas y sonar su protesta.
Paralelamente se escucharon los cohetones del Gobierno. Durante los primeros 15 minutos se vieron fuegos artificiales que iluminaron el cielo de colores. Todos venidos desde la sede de Pdvsa La Campiña. Uno tras otro brillaron en armonía. Desde la sede del Seniat lanzaron también pirotecnia.
En el recorrido por la ciudad capital la noche del miércoles no se observó a los grupos de seguidores del oficialismo que bajaron a las calles durante el lunes y el martes. Solo se vio a un grupo en la avenida Rómulo Gallegos, a la entrada de un sector popular, quienes se negaron a dar declaraciones y afirmaron que la fotografía era para señalarlos como que estaban haciendo disturbios.
Un habitante de los Jardines del Valle, vía telefónica, aseguró que el grupo de oficialistas que el martes cerró la subida a la calle 14 realizó este miércoles una pequeña marcha por el sector, acompañados de un camión que tiene el nombre de «Radio Verdura».
«Comenzaron luego que el cacerolazo terminó. Cantaban las canciones de la campaña y gritaban consignas. Luego subieron hacia la parte alta de la calle 17», explicó.
En Candelaria un grupo de habitantes de una residencia, sacó de su humilde vivienda dos grandes cornetas que colocaron en la acera. Desde allí se escuchaba música a favor de Nicolás Maduro. Algunos vecinos han señalado que estas personas no toman conciencia que los habitantes de la zona deben trabajar en la mañana temprano, porque el sonido lo dejan casi hasta amanecer.
Fuente: EU









