En la cocina se puede disfrutar tanto de los placeres culinarios como de los sexuales. Así lo demuestra una encuesta llevada a cabo por Just Eat, la plataforma líder mundial de comida a domicilio por Internet.
El 86% de los encuestados han confesado haber mantenido relaciones sexuales en la cocina. Y es que la cocina puede llegar a ser un lugar muy morboso que ofrece muchas posibilidades: los alimentos dan pie a la imaginación y a muchos juegos sensuales, los utensilios son muy provocativos y los muebles te permiten practicar nuevas posturas eróticas.
Concretamente, subirse a una encimera o tener sexo sobre una lavadora son las elecciones predilectas de los encuestados. Además, los usuarios han explicado la gran utilidad que tienen algunos utensilios para insinuarse a su pareja, especialmente el mortero para las mujeres y el delantal como prenda estrella para los hombres.
Sobre las posturas para practicar sexo en la cocina, los usuarios expertos recomiendan:
El orgasmo centrifugado: el mueble escogido es la lavadora. Nosotras nos sentamos encima y él se mantiene de pie. Es imprescindible que la lavadora esté en funcionamiento para que la escena sea aún más erótica.
El fogonazo: nos apoyamos sobre la vitrocerámica y él a nuestra espalda.
Encimera picante: nosotras nos recostamos sobre la encimera y él de pie.
Y vosotras, ¿compartís la devoción por la cocina como lugar erótico?
Fuente: Nosotras
