La justicia de Brasil dio plazo a Google hasta el 9 de noviembre para entregar información privada que supuestamente recolectó cuando confeccionaba su sistema de mapeo fotográfico Street View, reveló este jueves el portal del diario Folha de Sao Paulo.
De no hacerlo, se dispuso una multa equivalente a unos 50.000 dólares por día de retraso, hasta un máximo de 500.000 dólares.
La herramienta Street View, que muestra imágenes panorámicas de calles y ciudades de diversas regiones del mundo, como si el usuario se estuviera desplazando por ellas, fue confeccionada mediante la captura de fotografías a través de automóviles de la empresa Google.
De acuerdo con la denuncia planteada por el Instituto Brasileño de Política y Derecho a la Informática (IBDI) y detallada en la sentencia judicial, Street View también accedió a redes inalámbricas privadas de las zonas que recorría, e interceptó datos personales y comunicaciones electrónicas, todo a través de programas instalados en los vehículos de Google.
Según el texto de la sentencia, el IBDI recordó que hechos similares se produjeron en otras partes del mundo y fueron denunciados en 2010.
Por ello, de forma extrajudicial, el IBDI pidió a Google que informara si había realizado dicha actividad en Brasil.
Señalan que la firma estadounidense admitió que captó datos, pero aseguró que «no fueron utilizados por Google en sus productos o servicios».
Dijo además que fue retirado de sus autos el software que permitía la recolección.
La acusación se produce en medio de denuncias periodísticas basadas en documentos del exconsultor de inteligencia, Edward Snowden, respecto de que Estados Unidos espió a millones de brasileños, a la propia presidenta Dilma Rousseff y a la estatal Petrobras.
Google rechazó cualquier vinculación con las denuncias de espionaje que involucra a las agencias de seguridad estadounidenses.
Explicó al tribunal que la discusión sobre la forma en que se recolectó la información, ya ocurrió hace tiempo en muchos países, y se cerró. Admitió además que sus softwares permitían recolectar informaciones mediante señales de wi-fi abiertas.
Indicó también que se puso en contacto con las autoridades de los países donde ocurrieron los hechos, pero, según ellos, en Brasil no hay legislación al respecto ni una autoridad reguladora.
El Congreso de Brasil debate con carácter de urgencia una norma enviada por el Gobierno, que otorga un marco legal a internet, tras las denuncias de espionaje estadounidense.
Fuente: Agencias