El Alto Representante de Política Exterior de la Unión Europea (UE), Josep Borrell, valoró positivamente el acuerdo que firmaron los negociadores del Gobierno de Venezuela y la oposición en Barbados, pero advirtió que las “preocupantes” medidas tomadas en las últimas semanas lo “ensombrecieron”. Por eso, instó al chavismo a dar más pasos hacia la “democratización”, como quitar las inhabilitaciones a líderes opositores.
Borrell consideró que el año que viene será “clave” para Venezuela, porque habrá elecciones presidenciales. Por eso, animó a todas las partes a seguir dialogando para que los comicios sean “con garantías democráticas”, ya que de eso depende la reintegración del país sudamericano al ámbito político y económico internacional.
Los Veintisiete, en su última actualización de sanciones, decidieron extender seis meses en vez de un año los castigos a dirigentes chavistas, una medida “excepcional” que, según Borrell, es “una señal clara”. “Lo hemos repetido muchas veces: estamos dispuestos a revisar esas sanciones siempre que haya medidas objetivas que permitan progresos en el proceso de democratización”, dijo en un discurso ante el Parlamento Europeo.
Estas “medidas restrictivas” no son un objetivo sino “un medio para impulsar una solución”, enfatizó Borrell, que cree que hay espacio para “adaptarlas a las circunstancias”. “En esa adaptación se asumen riesgos, pero también se asume el riesgo de perder oportunidades”, indicó.
El jefe de la diplomacia europea, sin embargo, criticó que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) anulara las primarias en las que ganó María Corina Machado o las órdenes de detención emitidas en las últimas semanas contra otros políticos opositores o contra Roberto Abdul, presidente de la ONG Súmate y arrestado la semana pasada.
También mencionó como “problemas” las inhabilitaciones políticas que impiden a dirigentes de la oposición postularse a futuros procesos electorales. Al respecto, se limitó a “tomar nota” del procedimiento de revisión anunciado por las autoridades pero consideró necesario que al final “todos” los candidatos estén habilitados para futuros procesos.
La UE incluso está dispuesta a mandar una misión de observación electoral. Borrell prometió que el bloque evaluará cualquier solicitud según las circunstancias, entre ellas la participación de la oposición en esas elecciones.
Llama a una solución pacífica por el Esequibo
Borrell aprovechó su intervención para referirse a la “escalada” entre Venezuela y Guyana por la soberanía del Esequibo, temiendo que pueda “poner en peligro la estabilidad de la región”. El Alto Representante pidió “una solución pacífica y diplomática de acuerdo con el Derecho Internacional y el marco multilateral” y rechazó posibles “acciones unilaterales”.
Espera que la reunión entre los presidentes prevista para este jueves sirva para “rebajar la tensión” y evitar “soluciones por la fuerza a problemas políticos”.
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