EFE
El mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, abogó este viernes por “el pueblo armado por encima de todo” ante el presidente de la Corte Suprema del país, el magistrado Luiz Fux, en un acto en el que ambos fueron condecorados, en Brasilia.
“El pueblo armado jamás será esclavizado (…) el pueblo armado por encima de todo, en la forma de la ley”, afirmó el líder ultraderechista durante su discurso, con motivo de la entrega de las encomiendas de la Orden del Mérito del Ministerio de Justicia.
Desde que asumió el poder, en 2019, Bolsonaro ha impulsado diversas iniciativas para facilitar la compra de armas de fuego por parte de la población civil, aunque muchas de ellas han sido tumbadas de forma integral o parcial por el Supremo y el Legislativo, que han servido de freno a su política armamentística.
Este viernes, Bolsonaro, quien aspirará a la reelección en octubre, insistió en que “las armas salvan vidas” y que su Gobierno está empeñado en extender su uso para, según indicó, “evitar que una autoridad de guardia haga valer su fuerza dictatorial ante una población desarmada”.
También volvió a defender una propuesta que busca impedir llevar a la Justicia a un agente que mate a un delincuente en ejercicio de sus funciones, aunque se sospeche que pudo haber incurrido en abusos.
“Debemos trabajar y buscar el entendimiento entre los poderes para que el policía, al cumplir su misión, se vaya a casa a descansar y al día siguiente reciba una medalla y no la visita de un oficial de la Justicia”, manifestó Bolsonaro desde el atril, a pocos metros de Fux y del presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, también presente.
Sin embargo, esa medida, que por el momento no ha encontrado los apoyos suficientes en el Congreso, es rechazado por entidades de derechos humanos, que resaltan que los cuerpos y fuerzas de seguridad de Brasil ya se encuentran entre los más letales del mundo.
EFE