A seis días para que los Filis de Filadelfia efectúen su corte de 25 peloteros de cara a la ronda regular en las Grandes Ligas, el mánager de los cuáqueros, Ryne Sandberg, y el resto del cuerpo técnico aún evalúan una virtual inclusión de Bob Abreu en el róster.
Pese a sus 40 años, el aragüeño parece el indicado para conseguir el puesto de patrullero backup. El guardabosque compila modesto promedio de .281, con tres tubeyes y un triple en el spring training; sin embargo, su porcentaje de embasado es uno de los más elevados con .452 y nueve bases por bola.
El veterano competirá por un cupo en el equipo con Tony Gwynn Jr., quien posee promedio de .304, con un doble en los juegos de exhibición.
“Todos sabemos que Abreu toma turnos de calidad”, comentó el piloto Ryne Sandberg. “Él ha sacado muchos boletos en esta oportunidad, no ha tenido chance de hacer muchos swings, pero lo importante es que se mantiene siempre en las bases”.
Ayer los de la División Este alinearon a Bobby como jardinero derecho en un cotejo de escuadras divididas versus los Astros de Houston.
“En la Liga Nacional es importante para él que juegue en el jardín derecho”, comentó Sandberg. “Estoy seguro de que continuará teniendo oportunidades para brillar”.
Abreu podría retornar al conjunto de Filadelfia después de siete temporadas, el “Comedulce” estuvo con los del uniforme rojo por ocho temporadas y media antes de ser cambiado a finales de julio de 2006 a los Yanquis de Nueva York. “Solo creo que se tiene que adecuar, necesita más oportunidades para demostrar de lo que está hecho”, puntualizó Sandberg desde la localidad de Dunedin, en Florida.
Abreu vivió sus tiempos dorados en Filadelfia y en el Citizens Bank Park, estadio que conoce casi a la perfección.
Vistiendo el uniforme cuáquero finalizó líder en triples en 1999 con once e igualmente conquistó la vanguardia en tubeyes en 2002 con 50.
Jugó la totalidad de 162 partidos en 2001 y 2005, y estableció un récord de cuadrangulares en el derby de jonrones del Juego de las Estrellas de 2005, efectuado en Detroit.
Hernández en la tercera
César Hernández no quiere perderse la oportunidad de jugar a diario con los Filis de Filadelfia, y en ese sentido está abierto a cualquier posibilidad. Recientemente alineó en la tercera base. “Más oportunidad”, se limitó a decir el valenciano, de 23 años. Hernández ha jugado en segunda base, el campocorto y en todas las posiciones de los jardines. César posee velocidad y sería una inclusión agradable en la banca de los Filis, pero lo más probable es que comience en triple A para pulir ciertos detalles antes de establecerse arriba.
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