El exprimer ministro y líder de la derecha italiana Silvio Berlusconi aseguró este viernes que está dispuesto a apoyar un candidato de la izquierda para la presidencia de la República con la condición de que sus rivales acepten formar un «gobierno de unidad» con la coalición de derecha.
«Estamos dispuestos a debatir el asunto», declaró Berlusconi en una entrevista exclusiva concedida al diario de centroizquierda La Repubblica.
La elección del nuevo presidente de la República a partir del 18 de abril, según las complejas normas de una república con un régimen parlamentario, es un momento muy importante para Italia, ya que los candidatos deben ser figuras por encima de la partes, debido a que permanece en el poder por siete años y son elegidos por votación por las dos salas del Parlamento.
Es la primera vez que Berlusconi acepta públicamente la posibilidad de que la presidencia de la República sea ocupada por un candidato de izquierda, ya que hasta ahora había vetado esa propuesta exigiendo una personalidad cercana a la derecha.
«Si nos ponemos de acuerdo sobre el Quirinal (la presidencia de la República) también tenemos que encontrar un acuerdo para un Ejecutivo de unidad, con ministros elegidos juntos, o no se concluirá nada», advirtió Berlusconi.
El líder de la izquierda, Pier Luigi Bersani, ha rechazado hasta ahora toda alianza con la derecha para salir de la parálisis política que vive Italia tras las elecciones legislativas de finales de febrero, que no dieron un vencedor claro, por lo que no se ha podido formar un gobierno estable.
Bersani aceptó reunirse por primera vez el pasado 9 de abril con Berlusconi para debatir sobre la elección clave del nuevo presidente de la República.
«No se citaron nombres» durante el encuentro, contó Berlusconi.
Según los medios de prensa circula un abanico de posibles candidatos, entre ellos varios exmagistrados y parlamentarios y muy pocas mujeres, lo que ha generado controversias en todo el país.
«Un gobierno inestable, apoyado por algún grupito, no tendría la fuerza de asumir los procedimientos que necesita el país para salvar la economía y negociar con la Unión Europea», aseguró Berlusconi.
«La situación es dramática y nadie puede hacer como si nada», aseguró Berlusconi tras condenar la idea de la izquierda de querer aliarse con el Movimiento Cinco Estrellas del cómico Beppe Grillo, que se convirtió en la tercera fuerza del Parlamento con sus posiciones «antisistema» y contra la llamada «casta» política.
Berlusconi negó que esté negociando una «amnistía» para él debido a sus líos judiciales por fraude fiscal e inducción a la prostitución de una menor, que podrían decretar su «muerte política».
«La amnistía es indigesta para todos. La gente no lo aceptaría. Sería una manera de enfadar aún más a los ciudadanos», reconoció.
Fuente GV
