¿A quién no le gusta beberse una deliciosa taza de café al despertar? Muchos se consideran adictos al café, y si bien ningún exceso es bueno, no debes perder de vista este dato: el café ayuda a bajar de peso. ¿Lo sabías? Si no es así, ¡prepárate para conocer el secreto!
Beneficios de la cafeína
Mucha gente piensa que tomar una taza de café hace que se funda la comida que se acaba de ingerir. Ciertamente, es sobre todo un deseo, pero los estudios sostienen unos datos positivos pero más realistas: beber una taza de café caliente al levantarse y media hora antes de comer puede reducir el apetito en un 35% sobre el conjunto de la jornada.
El café procede de Etiopía. La especie de café más antigua es la arábica (cultivada en las regiones secas a temperatura media); la otra especie muy conocida es el robusta (cultivada en las regiones húmedas y cálidas). Se estima que hay 400 variedades de café en el mundo, pero sólo se conoce una veintena.
El café contiene cafeína (un alcaloide) que también se encuentra en el té, el cacao, las colas, la guaraná, el mate, etc. Una taza de café contiene 125 miligramos de cafeína, una taza de café instantáneo 90 miligramos, una de té 70 miligramos, un vaso de cola 50 miligramos, una taza de espresso 40 miligramos, y una taza de chocolate caliente 25 miligramos.
Los científicos han descubierto que el café contiene antioxidantes (como polifenoles, que también los contiene el vino). Gracias a sus antioxidantes, el café podría proteger de varias enfermedades (Parkinson, cáncer de colon, cáncer de vejiga, enfermedades inflamatorias, etc.).
¿Por qué el café ayuda a adelgazar?
El café refuerza nuestro metabolismo, encargado de quemar la grasa y aumentar los niveles de energía y que, a su vez, nos permite desplazarnos. Unos estudios han demostrado que cuanto más cafeína consume una persona, más aumenta su metabolismo (es decir, que quema más calorías en reposo).
Otros estudios demuestran que las personas que hacen ejercicio y que beben una taza de café antes de una sesión de entrenamiento se encuentran en mejor disposición para realizar el ejercicio durante más tiempo y a un ritmo más intenso. Un estudio griego ha descubierto incluso que el café permite combatir mejor las agujetas que se sienten después del ejercicio físico.
El nombre científico de este proceso es termogénesis, o producción de calor corporal. El café aumenta la termogénesis, es decir, el hecho de que nuestro cuerpo quema las calorías excedentes que se han consumido, incluso en reposo. No obstante, el mecanismo de la termogénesis suele ser deficitario en personas obesas. Peor aún, estas personas ralentizan su termogénesis cuando siguen un régimen hipocalórico.
Cafeína para bajar de peso
Estos estudios recientes demuestran que unas 6 tazas de café o 600 miligramos de cafeína al día son necesarias para bajar de peso significativamente, y pueden ser útiles dentro de un régimen global con el objetivo de adelgazar.
A lo largo del día, una taza de café puede servir de sustituto para reducir las ganas de comer alimentos más ricos en materias grasas y facilitar la digestión (aumentando la secreción de saliva y de enzimas digestivas). El café puede estimular el intelecto, aumentando la vigilancia y la concentración.
Por consiguiente, el café para adelgazar se debe beber sólo. Mientras que una taza de café ordinario aporta cero calorías, la misma taza de café con una cucharada sopera de nata aporta 50 calorías y 5 gramos de materias grasas. Si además se añade una cucharada sopera de azúcar, se añaden otras 50 calorías suplementarias.
¿Has probado el café para bajar de peso? ¿Te ha dado buenos resultados? Recuerda que funcionará siempre y cuando mantengas una dieta saludable y hagas ejercicio físico a diario. ¡Cuéntanos tu experiencia!
Fuente: iMujer