El Banco Central de Venezuela (BCV) vendió 40 millones de dólares a la Banca este miércoles 16 de noviembre, con el fin de tratar de moderar la aparentemente inevitable tendencia alcista del tipo de cambio, que se verifica de manera acelerada en el mercado paralelo.
El ente emisor hizo una extensión de la cuadragésima sexta intervención del año, que arrancó la semana con una asignación de 30 millones de dólares, de manera que esta semana los bancos han recibido 70 millones de dólares en un periodo cuando la cotización promedio de las mesas cambiarias ha subido 7,05%, mientras en el mercado paralelo el alza ha sido de 9,75% en la semana concluida este 16 de noviembre.
Las variaciones indican que el tipo de cambio oficial se está acelerando, en función de irse acoplando progresivamente con el mercado paralelo, de manera que la brecha entre ambas cotizaciones se redujo a 15,92% este miércoles 16, cuando había alcanzado un máximo de 17,92% el martes 15.
Las informaciones extraoficiales que proceden de fuentes bancarias indican que las entidades bancarias no cuentan con la oferta de divisas necesaria para atender una demanda creciente, no solo por una mayor emisión monetaria, sino por un retraso en la facturación de PDVSA que es el origen de los fondos que liquida el BCV.
Al respecto, la consultora Síntesis Financiera, señala que la situación es tan complicada, a tal punto, que hay un atraso de 600 millones de bolívares en el cronograma de pagos de la Administración Pública.
El BCV vendió los 40 millones de dólares que colocó este miércoles a un valor de 9,80 bolívares por euro -equivalentes a 9,56 bolívares por dólar-, un aumento de 2,29 % en comparación con el precio del lunes 14. En lo que va de noviembre, el BCV ha subido el precio de sus operaciones de intervención en 18,50%.
De continuar este paso, se podría alcanzar, al cierre de noviembre, un incremento parecido al registrado en agosto, que fue de 34,13%.
En términos concretos, es muy poco probable que se produzca una contención eficaz de los precios del dólar en lo que resta del mes y, muy probablemente, en lo que queda del año, a menos que se le inyecte al mercado vía intervención cambiaria, una fuerte suma que conlleve a una caída en la cotización del dólar oficial.
2001