El gigante bancario español Santander anunció que obtuvo un beneficio récord de 11.080 millones de euros (casi 12.000 millones de dólares) en 2023 gracias a la subida de las tasas de interés y al aumento de clientes en el mundo.
Este resultado, obtenido gracias al dinamismo del último trimestre (2.930 millones de euros de beneficios netos), es un 15% superior al de 2022 (9.600 millones de euros), que ya había sido el más elevado jamás alcanzado por el grupo bancario.
El beneficio, en alza de 15% con respecto al año 2022 (9.600 millones de euros), es superior a lo esperado por los analistas consultados por la compañía de datos financieros Factset, que preveían unos 10.610 millones de euros.
«2023 ha sido un año clave para Santander», remarcó en un comunicado la presidenta de la entidad, Ana Botín, asegurando que el banco había alcanzado «todos los objetivos». «Estoy convencida de que 2024 será aún mejor», añadió.
El banco español atribuye sus buenos resultados al dinamismo de la actividad en sus principales mercados, especialmente en Europa, donde la subida de las tasas de interés decidida por el Banco Central Europeo (BCE) impulsó sus ingresos.
También los atribuye a la llegada de casi cinco millones de nuevos clientes. El grupo, muy presente en Europa y América Latina, cuenta ya con 165 millones de clientes en todo el mundo.
Gracias a este dinamismo, el resultado bancario neto del grupo español -equivalente a su volumen de negocio- alcanzó los 43.260 millones de euros. Esta cifra, en línea con las expectativas de Factset, es un 12% superior a la de 2022.
Este buen comportamiento permitió al primer banco español aumentar el nivel de sus depósitos (+4%) y compensar el impacto en sus cuentas de la devaluación del 54% del peso argentino anunciada a mediados de diciembre por el nuevo presidente del país, Javier Milei.
También compensó el descenso de la rentabilidad observado en América del Norte (caída de beneficios de 20%) y en Brasil (-25%), vinculado, según Santander, a los efectos de la inflación y a un nivel más alto de provisiones.
Alza del dividendo
Los resultados del Santander -a pesar de estos pequeños matices- ilustran la solidez del sector bancario español, que ha batido un récord tras otro en los dos últimos años, en un contexto económico boyante en España, donde el crecimiento alcanzó el 2,5% el año pasado.
El martes, el segundo banco español, el BBVA anunció que obtuvo beneficios récord de 8.020 millones de euros (8.675 millones de dólares) en 2023, un 22% más que los 6.420 millones de 2022 y que ya eran un récord. El tercer banco español, Caixabank, publicará el viernes sus resultados, que también se esperan altos.
Esto permitió al sector compensar el impacto del impuesto excepcional a los grandes grupos bancarios introducido en España hace un año por el Gobierno del socialista Pedro Sánchez, para financiar medidas de apoyo al poder adquisitivo.
Este impuesto, pagado por una decena de bancos, debería reportar al Estado español cerca de 3.000 millones de euros entre 2023 y 2024. Esto ha llevado al Santander a dotar una provisión de casi 230 millones de euros para su ejercicio de 2023.
A principios de febrero, Ana Botín evaluó entre 220 y 230 millones de euros el impacto de esta medida fiscal en su grupo.
En vista de los buenos resultados de 2023, Banco Santander señaló que espera un nuevo aumento de los ingresos en 2024, «pese a los mayores riesgos geopolíticos y la ralentización de la economía global».
A parte, la entidad incrementará la remuneración a sus accionistas, que alcanzará los 5.500 millones de euros a cuenta de 2023, un incremento de 50% del dividendo por acción comparado al año anterior.
CNN