Ayuda humanitaria de la ONU entró anoche a la Franja de Gaza por primera vez por el norte del enclave, donde la hambruna hace estragos, en una nueva ruta que permite que los alimentos y otros artículos básicos lleguen directamente a zonas inalcanzables hasta ahora.
«De acuerdo con las directivas gubernamentales, seis camiones de ayuda humanitaria del Programa Mundial de Alimentos (PMA) entraron anoche (martes) al norte de la Franja de Gaza a través de la puerta 96 de la valla de seguridad», informó el Ejército israelí en un comunicado.
El PMA confirmó el reparto el martes de alimentos suficientes para 25.000 personas en ciudad de Gaza, en un «primer convoy exitoso que llega al norte desde el 20 de febrero», en medio de la presión internacional a Israel para que facilite la entrada de más ayuda humanitaria al enclave.
El Ejército explicó que esto forma parte de «un programa piloto para evitar que la organización terrorista Hamás se haga cargo de la ayuda», después de que Israel haya acusado repetidamente al grupo, que gobierna de facto el enclave, de acaparar la ayuda internacional para sus intereses y no repartirla entre civiles.
Como ha ocurrido con toda la ayuda que entra desde finales de octubre, funcionarios de seguridad israelíes sometieron a los camiones del PMA a «exhaustivos y minuciosos» controles en el cruce de Kerem Shalom -que conecta directamente Israel con la Franja por el sur-, algo que entorpece y ralentiza el flujo de ayuda.
El convoy del PMA entró por una nueva carretera militar utilizada hasta ahora por el Ejército para sus operaciones en el norte y centro del enclave, controlada por el Ejército israelí, que se extiende desde la frontera, a la altura del kibutz Beeri, hasta la costa mediterránea de la Franja.
La portavoz del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Shaza Moghraby, adelantó anoche la noticia y matizó que la entrada de alimentos suficientes para 25.000 personas «demuestra que transportar alimentos por carretera es posible», ya que Israel limita las vías de entrada terrestre, que son las más rápidas y efectivas.
«Esperamos ampliarlo, pero necesitamos que el acceso sea regular y consistente, especialmente con la gente del norte de Gaza que está al borde de la hambruna. Necesitamos puntos de entrada directamente al norte», indicó.
El asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, adelantó ayer que EEUU estaba trabajando con Israel para aumentar la cantidad de ayuda «por tierra, tanto a través de Kerem Shalom como a través de un nuevo cruce».
Marruecos informó ayer de que enviará entre martes y miércoles 40 toneladas de ayuda alimentaria al norte de Gaza mediante una vía terrestre «inédita», desde el aeropuerto de Tel Aviv hasta el paso de Kerem Shalom, desde donde entra la mayor parte de la ayuda desde octubre, además de por el cruce de Rafah, con Egipto, aunque esa ayuda es también previamente inspeccionada por Israel.
La ayuda magrebí llegó ayer por vía aérea al aeropuerto de Ben Gurion, en Tel Aviv, y tras ser inspeccionada por Israel, será entregada a la Media Luna Roja palestina para ser distribuida en el norte de la Franja, informaron a EFE fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores marroquí.
Como parte de la presión internacional para aumentar el flujo de ayuda, Israel también ha accedido a ampliar el número de camiones que ingresan a Gaza desde Jordania a través del cruce de Allenby con Cisjordania; y esta semana Israel comenzó a transferir envíos de harina de EEUU y Turquía que llevaban dos meses retenidos en el puerto de Ashdod.
Ante las acuciantes necesidades humanitarias de la Franja, países como Jordania, Francia, Egipto o EEUU llevan varias semanas lanzando ayuda por aire, aunque no es tan eficaz como la vía terrestre porque no se controla su destino final; mientras que ayer se inauguró el corredor marítimo abierto por la UE y EEUU desde Chipre y se espera la llegada mañana del primer buque, el español Open Arms, con 200 toneladas de alimentos de la ONG World Central Kitchen.
EFE