Las autoridades del estado Zulia descartaron este miércoles que la muerte de Yukpas en la Sierra de Perijá, municipio Perijá del estado Zulia, sea producto de una supuesta fumigación para el combate de la malaria.
Hasta los momentos se han cuantificado 8 personas muertas y 70 intoxicados presuntamente por la ingesta de ron adulterado de procedencia colombiana.
Los cuerpos de seguridad y de salud se encuentran en la zona investigando las causas y tomando muestras a los miembros de las comunidades e, igualmente, se dio la orden de retirar el licor blanco de los puestos de venta en Machiques y Rosario de Perijá.
Blagdimir Labrador, secretario de Gobierno; Nohelí Pocaterra, secretaria de Pueblos y Comunidades Indígenas de la Gobernación; y Ricardo Portillo, subsecretario de Salud regional y autoridades de seguridad en la región, aseguraron que la situación presentada en la Sierra de Perijá nada tiene que ver con fumigaciones que normalmente se realizan en la zona.
El subsecretario de Salud del ejecutivo zuliano informó que en los resultados de los exámenes toxicológicos practicados al agua de los afluentes no se encontró ninguna sustancia química que pudiese afectar la salud de los habitantes de la serranía perijanera.
«De ser un envenenamiento químico, igualmente habrían sido afectados los animales de la zona, como patos, gallinas, chivos, perros, entre otros», detalló el galeno.
El pasado sábado 7 de septiembre 59 indígenas de la etnia caribe yukpa ingresaron a diversos centros asistenciales de la región. Cinco de ellos murieron luego de presentar malestar general, cefaleas, vómitos, sangrado nasal y agitación psicomotriz.
La emergencia se intensificó el pasado martes 10, cuando 15 indígenas barí ingresaron al Centro de Diagnóstico Integral, ubicado en el sector El Cruce, en el municipio Jesús María Semprún, además de otros 23 yukpas con la misma sintomatología y teniendo en común la ingesta del ron, conocido como Antioqueño.
Noelí Pocaterra expuso que las autoridades regionales están investigando y tomando medidas ante esta situación, que enluta a varias familias de la serranía perijanera.
Fuente: GV