Los repuestos, partes y accesorios de vehículos deberán venderse a los precios que marcaban en febrero de 2013 hasta que el Ejecutivo determine los importes que considere justos para su comercialización.
Así lo establece la cuarta disposición transitoria del proyecto de ley que regula la compra y venta de vehículos automotores nuevos y usados, nacionales e importados.
El apartado establece que la Superintendencia Nacional de Costos y Precios (organismo designado por el Gobierno para la fijación de costos y precios en el sector automotor) deberá estipular los precios de autopartes en un lapso no mayor a 180 días.
Los vehículos también deberán venderse a lo que marcaban en febrero de 2013, de acuerdo con lo estipulado en la primera disposición transitoria del texto, publica un reporte de El Nacional. Sobre la medida, una fuente de la industria que prefirió no ser identificada señaló que de aprobarse el proyecto de ley, los precios de los automóviles deberán comercializarse a los que exhibían en diciembre del año pasado, porque las ensambladoras incrementaron los precios en marzo de este año. “En febrero teníamos los mismos precios de 2012”, reiteró.
La quinta disposición transitoria dice que los vehículos nuevos (ensamblados en el país o importados) que se hayan comercializados desde el 1° de enero de 2013 deberán tener una garantía de 3 años o 60.000 kilómetros de recorrido, lo que ocurra primero, según el artículo 20 del proyecto. En lo que se refiere a las motos, el mismo apartado indica que tendrán una garantía de un año u 8.000 kilómetros de recorrido.
“La ensambladora o importadora que contravenga este articulo será sancionado con la aplicación de una multa de 20.000 unidades tributarias”, lo que equivale a 2,14 millones de bolívares.
Sobre las multas, el diputado Richard Blanco, de la Comisión de Administración y Servicios de la Asamblea Nacional, dijo que eran exageradas, que los montos debían ser considerados.
A propósito del proyecto de ley, del que 32 artículos están aprobados en segunda discusión, dijo que no contribuirá a elevar la oferta de vehículos en el país; que para aumentar el número de unidades en el mercado las ensambladoras y demás empresas de la industria deben contar con el suministro oportuno y fluido de divisas para operar de manera óptima.
Fuente: Banca y Negocios