Afectado por el desplome de los precios del petróleo desde mediados de 2014, el gobierno de Nicolás Maduro se vio obligado a llevar de tres a dos los tipos de cambio oficiales y a que uno de ellos tuviera un precio variable, que de acuerdo con la normativa debía responder a la oferta y la demanda, pero que en la práctica, seis meses más tarde, el Banco Central de Venezuela sigue fijando, sin que se conozca el criterio que utiliza para ello.
El director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, indicó en su cuenta de Twitter, que el alza en el mercado paralelo era lógico “dado el incremento de liquidez y gasto público de las últimas semanas. Además de poca oferta”.
Según las estimaciones de Oliveros, a finales de año el tipo de cambio paralelo podría estarse ubicando entre Bs 1.400-1.500 por dólar.
El Carabobeño