Aunque todavía no culmina el año, la cifra de mujeres asesinadas en la Gran Caracas aumentó 49,3% en comparación con 2012, al pasar de 75 a 112 víctimas este año. Una de las razones por las que se podría estar dando este fenómeno, es el recrudecimiento general de la violencia en la sociedad venezolana.
Esta fue una de las consideraciones hechas por el sociólogo Luis Cedeño, director de la ONG Paz Activa, quien señaló que este indicador puede ser un termómetro de lo mal que está el país en cuanto a la violencia.
El pasado fin de semana la lísta de víctimas fue engrosada por Ismar Mendoza Vargas, de 28 años de edad, y Yolimar Acosta, de 34 años de edad, asesinadas la noche del sábado en la vereda 20 del sector García Carvallo del barrio El Onoto de Caricuao.
«No se trata de feminicidios, porque no las matan por su condición de mujer (aunque muchos de los casos puede que si lo sean). Ellas se han convertido en víctimas colaterales de la violencia, a diferencia de antes, cuando solían representar un número marginal dentro de las estadísticas de homicidios», explicó Cedeño.
Llanto y dolor
«Yo creo que a mi hermana la mandaron a matar. Ella era mi única familia», relató William Acosta, hermano de Yolimar Acosta.
Para los familiares de las víctimas aún no está claro el por qué las mataron, pero presumen que posiblemente el ataque tenía como objetivo a Amilcar Alfonzo Vargas, el padre de los dos hijos de Acosta, quien también estaba en el lugar de los hechos, pero que huyó cuando vio a los homicidas.
Ayer a las 10:00 am salieron las caravanas con los cadáveres de Ismar Mendoza y Yolimar Acosta con destino al cementerio Jardines El cercado, donde ambas fueron enterradas. Familiares, vecinos, representantes, ex alumnos y compañeros de trabajo de la Unidad Educativa Tomás Vicente González se congregaron en la funeraria para darles el último adiós.
«Es muy lamentable lo que pasó. Ahora se quedan esos niños sin sus maestras por culpa de la delincuencia que hay en el país», expresó Rosmary Ustariz, maestra del mismo colegio donde trabajaban las dos víctimas.
Adriana Ramírez, madre de uno de los alumnos de las víctimas, describió a las docentes como mujeres muy colaboradora y cariñosas con los niños. «Es un hecho lamentable. Cómo explicarle a esos niños tan pequeños que les mataron a las maestras», dijo. El Ministerio Público comisionó al fiscal 124º de Caracas, Lucas Blanco, para que dirija la investigación por el doble crimen.
Cómo ocurrieron los hechos
Según lo que contó la sobrina de Yolimar Acosta, la víctima estaba celebrando porque el mayor de sus hijos había ganado un partido de béisbol, junto a Mendoza y su pareja. Al lugar se presentaron dos hombres con el rostro cubierto, quienes sin mediar palabra les dispararon y huyeron.
«El malandro le quitó al niño de los brazos a mi tía -Yolimar-, y le dio un tiro en la cabeza. Ismar trató de correr y también le dispararon. Las dos quedaron ahí muertas», relató la sobrina de Acosta.
Fuente: EU
