La organización Médicos sin Fronteras condenó el bombardeo al recinto asistencial que otorga apoyo en la provincia de Idleb, que es una zona de guerra.
Un hospital de la organización Médicos Sin Fronteras ubicado en la provincia de Idlib, fue blanco de un ataque aéreo «deliberado», que dejó hasta ahora ocho personas desaparecidas.
«Condenamos este nuevo ataque contra una estructura médica, que además parece haber sido deliberadamente dirigido contra la misma», dijo la ONG a través de un comunicado.
Esto dejará a cerca de 40 mil personas sin acceso a atención médica, según aseguró el coordinador de la misión de Médicos Sin Frontera, Massimiliano Rebaudengo.
La destrucción se produjo luego del ataque de cuatro misiles en dos ocasiones con un intervalo de esasos minutos.
En el centro trabajaban 54 personas, habían 30 camas, dos quirófanos, una clínica ambulatoria y servicio de urgencias.
MSF se encontraba apoyando al hospital desde septiembre del año pasado, suministrando equipos médicos y financiamiento.
No es la primera vez que una instalación médica que recibe respaldo de MSF es atacada en Siria. El pasado 5 de febrero, tres personas murieron y otras seis, entre ellas una enfermera, resultaron heridas por un bombardeo contra el hospital de Tafas, en el sur de Siria y ayudado por la ONG.
Fuente: LT
