Después de la celebración del cumpleaños de su hermanita de dos años, todo se convirtió en una tragedia. Un niño de 13 años de edad, quedó en medio de una balacera que se formó la noche del sábado en la avenida 4 con calle 5 del sector 1 de La Carucieña, al oeste de Barquisimeto.
En horas de la tarde celebraron un año más de vida de la niña, como a las 7:00 p.m. finalizó la fiesta y una hora más tarde el niño fue hasta la bodega, pero mientras estaba ahí unos sujetos se encontraron en el lugar, discutieron y sacaron sus armas de fuego para iniciar un enfrentamiento a tiros, lo que según las versiones se ha hecho costumbre en el lugar.
El joven, de 13 años, estudiante de sexto grado, no encontró hacia dónde correr, pues estaba en medio del tiroteo. Vecinos del sector aseguraron haber escuchado unas 10 detonaciones. Cuando todo se calmó, le avisaron a su familia que vive cerca, lo tomaron en brazos, lo montaron en un carro particular y lo llevaron hasta la Emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda, donde lo atendieron con la urgencia del caso.
La tragedia destrozó el corazón de sus padres, vecinos y amigos, pero todos rezaban y le pedían a Dios por su sanación; sin embargo, a la 1:00 a.m., aproximadamente, el infante dejó de respirar y se fue al lado del Señor.
«Nosotros creemos sólo en la justicia divina, Él fue el que vio todo y cómo cayó un niño inocente que no debía morir todavía”, expresó una familiar que estaba en las afueras de la morgue del Hcamp y no quiso identificarse.
Por su parte, Manuel Puertas, padre del pequeño, comentó que en sus tiempos libres el mayor de sus tres hijos jugaba fútbol.
Al sitio del suceso se apersonaron los pesquisas del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc). Recabaron información para dar con el paradero de los que cometieron el atroz crimen.
Fuente: El Impulso
