El ilegítimo TSJ publicó una írrita sentencia mediante la cual pretende anular la reforma parcial del Reglamento de Interior y Debates de la legítima Asamblea Nacional aprobada en sesión extraordinaria del pasado martes.
Pretende la Sala Constitucional desconocer la competencia constitucional que tiene de manera exclusiva la Asamblea Nacional para dictar sus propias normas de funcionamiento.
La reforma sancionada vigente tiene su causa en la persecución que desde ese mismo TSJ se ha emprendido contra ya más de 30 diputados electos soberanamente por el pueblo.
Mediante juicios nulos e inconstitucionales que violan la inmunidad parlamentaria, el ilegítimo TSJ -como brazo ejecutor de la represión del régimen- persigue, enjuicia, detiene u obliga a diputados principales al exilio, para que no puedan ejercer la representación que el pueblo venezolano les dio.
Esta artimaña va de la mano con la compra de las conciencias de algunos diputados que han traicionado a sus electores y pretenden incorporarse en las sesiones del parlamento e impedir que los diputados perseguidos puedan ejercer su derecho al voto, en evidente coordinación con el régimen usurpador.
Los Diputados José Gregorio Noriega, Luis Parra, José Brito, Adolfo Superlano y Conrado Pérez (Principales), Leandro Domínguez y Jesús Gabriel Peña (Suplentes) han decidido traicionar la causa de la libertad de nuestra patria y la prosperidad de nuestro pueblo. Esta lucha ha dejado muertos, presos, exiliados y perseguidos del régimen. Han traicionado así la confianza que con su voto les depositaron los venezolanos en la última elección libre que tuvo nuestro país, la de nuestra legítima Asamblea Nacional.
Son algunos de ellos los que acudieron al ilegitimo TSJ del régimen para que dictara la inconstitucional sentencia. Ellos traicionan al voto del pueblo venezolano al haberse prestado para que se pretenda cambiar la composición política de la Asamblea Nacional.
Ha sido precisamente la defensa de la voluntad del pueblo de Venezuela realizada por la inmensa mayoría de nuestros diputados, lo que ha originado que el régimen haya usado a su TSJ para declarar un desacato inexistente, pretendido anular todos los acuerdos y leyes aprobados por la AN, y haya convocado incostitucionalmente a una Constituyente para tener su propio parlamento, el que no obtuvo con el voto del pueblo.
Al haber fracasado, apela de nuevo ahora a su TSJ ilegítimo para perseguir diputados, tratar de anular la reforma parcial del reglamento interno y tratar de incorporar en las votaciones futuras a diputados sin principios. Es parte de la denunciada Operación Alacrán.
Esta operación continuará, pero desde el Poder Legislativo Nacional señalamos que no permitiremos que la composición politica del parlamento sea modificada mediante la trampa y la publicación de irritas sentencias producidas por el mismo TSJ ilegítimo que nos persigue y pisotea con cada decisión la Constitución Nacional.
El único que tiene el poder de modificar la composición de parlamento es el pueblo y es a quien nos debemos y a quien estamos defendiendo. Ni el régimen ni su TSJ pueden variar o anular la reforma aprobada del Reglamento de Interior y de Debates de la Asamblea Nacional.
Los diputados que son objeto de persecución inconstitucional, ejerceran la represetación parlamentaria que el pueblo les dio y, el próximo 5 de Enero de 2020, la gran mayoria de los diputados demócratas ratificarán a Juan Guaido como Presidente de la Asamblea Nacional y Presidente encargado de la Republica en virtud de la usurpación que persiste.
Asamblea Nacional de Venezuela
.@AsambleaVE señala a los diputados Luis Parra, José Brito, José Gregorio Noriega, Leandro Dominguez, Jesús Gabriel Peña, Conrado Pérez y Adolfo Superlano de sucumbir ante la dictadura corrupta con la Operación Alacrán. pic.twitter.com/CONFyOV9V2
— Centro de Comunicación Nacional (@Presidencia_VE) December 20, 2019