La Asamblea Constituyente de Venezuela suspendió la sesión que tenía prevista para este domingo en la que se esperaba que fuera instalada la llamada “Comisión de la Verdad” para empezar a establecer responsabilidades por hechos violentos en las manifestaciones antigubernamentales, de los que el Gobierno acusa a la oposición.
La suspensión de la segunda sesión de la asamblea constituyente conformada solo por chavistas se hace en el marco de una situación irregular que se presentó en el estado Carabobo (centro norte) donde un grupo de militares rebeldes tomó la base militar Fuerte Paramacay, un levantamiento que ya fue controlado según el Gobierno.
Esta situación ha dejado, por el momento, un saldo de una persona fallecida, un herido de gravedad, y siete detenidos.
La suspensión de esta medida fue confirmada a EFE por fuentes de la Asamblea, que tomó posesión el viernes en el Palacio Federal Legislativo y empezó a trabajar este sábado destituyendo a la fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, que había denunciado la Constituyente como un intento de instaurar “un sistema totalitario”.
Según han adelantado el presidente Nicolás Maduro y varios integrantes de esta Asamblea -elegida el 30 de julio con el rechazo de la oposición y de la mayoría de países occidentales y de la región- la comisión debe poner fin a la “impunidad” de quienes, según el oficialismo, han promovido el “terrorismo” en el país.
El propio presidente Maduro ha amenazado con la cárcel a algunos líderes opositores por haber convocado las manifestaciones contra Maduro y la Constituyente que ha vivido el país caribeño desde el pasado 1 de abril, que han sido dispersadas a menudo por las fuerzas de seguridad y en las que han muerto al menos 121 personas.
EFE