Arabia Saudita donó este viernes 136 toneladas de dátiles secos a Nicaragua para complementar la merienda escolar de 150.000 niños de primaria en zonas pobres de la Costa Atlántica y del Pacífico norte del país, informaron las autoridades.
«Quisiera expresar mi felicidad al saber que dicha donación de Arabia Saudita de dátiles será incluida como parte de la comida escolar gratuita en Nicaragua», afirmó el embajador del país árabe en México, Hussein Alassiri, durante el acto de entrega en el colegio público Rigoberto Lopez Pérez de Managua.
Los dátiles, frutas de origen oriental con alto contenido de azúcar, serán incorporados al plato de arroz, frijoles, cereales, maíz y leche que los profesores sirven diario a sus alumnos en los colegios de zonas pobres como parte del programa «Merienda Escolar», que impulsa el gobierno con apoyo del Programa Mundial de Alimentos (PMA) para evitar la deserción por hambre.
El programa estatal beneficia a más de un millón de alumnos, pero solo 150.000 degustarán a partir de ahora esta nutritiva fruta que aporta un valor energético de 50 calorías cada una, además de vitaminas y minerales para «combatir la anemia».
Arabia Saudita -el mayor exportador de dátiles del mundo- tiende «la mano de amistad y cooperación a todos los pueblos amantes de la paz» como Nicaragua, aseguró Alassari ante un nutrido grupo de alumnos, que después de la ceremonia probaron por primera vez los dátiles.
«Es rico, sabe a almíbar», dijo a la AFP Ángel García, un estudiante de primaria.
Cientos de niños se encaminaron luego a sus aulas de clase a terminar de comer sus meriendas.
Para garantizar el plato de comida, los profesores entregan a diario una cuota de granos y cereales al padre de familia, a quien corresponde preparar los alimentos y enviarlos al día siguiente al colegio, de acuerdo a un calendario interno.
La merienda «ayuda mucho a que los niños se mantengan en clase» porque hay muchos alumnos que llegan sin comer, dijo a la AFP Leandra Carbajal, maestra de primer grado del centro, mientras los alumnos comían en sus pupitres.
A veces, los padres se ponen de acuerdo para complementar el plato con un poco de queso, crema o espaguetis, para que sus hijos coman mejor, reduciendo a su vez el consumo de comida chatarra, dijo la maestra.
Fuente: Agencias
