Más de cien perros y decenas de otros animales murieron envenenados en una ciudad de la provincia argentina de Córdoba al presuntamente ingerir cebos con una sustancia altamente tóxica que desconocidos colocaron en distintos puntos de la localidad.
Perros, gatos, aves y gallinas aparecieron muertos el domingo en la plaza principal y en otros sitios de Deán Funes, ubicado al centro de Córdoba y a unos 900 kilómetros al norte de Buenos Aires.
Una matanza similar se había producido a fines de enero en el mismo poblado, con un saldo de 200 animales muertos.
Las autoridades municipales decretaron este lunes alerta sanitario y suspendieron las clases hasta tanto los expertos puedan identificar la sustancia utilizada para envenenar a los animales y se completen las tareas de limpieza del espacio público.
“Es una tarea de un grupo organizado, que tiene un morbo y crueldad que no tiene precedentes”, dijo el lunes Mónica Ingelmo, secretaria de Prevención y Promoción de la Salud de Córdoba a radio Cadena 3 al referirse sobre los presuntos responsables de la masacre.
En la plaza y en otros sectores de la ciudad aparecieron cebos con la forma de una albóndiga con cristales de color blanco en su interior, que se sospecha fueron utilizados para envenenar a los animales.
La sustancia sería altamente tóxica al tal punto que las moscas que se posaban sobre los cuerpos de los animales morían en el acto, relató a periodistas el secretario de la alcaldía de Deán Funes, Germán Facchín.
En forma preventiva los cuerpos de los animales fueron depositados en un contenedor ubicado en una dependencia municipal.
Facchín manifestó que probablemente los autores del hecho sean los mismos de la matanza ocurrida meses atrás y que nunca fueron identificados.
Fuente: Diario La Nación